El secreto mejor guardado de María Pombo y Pablo Castellano al fin ha sido desvelado. Han pasado dos días desde que la influencer diera a luz a Martín, su primogénito, y el matrimonio no puede estar más feliz. Desde que tuvieran en brazos al pequeño no han dejado de publicar contenido en sus redes sociales sobre cómo están siendo sus primeras horas como padres: desde enseñar cómo cambian sus primeros pañales hasta narrando la angustia que han pasado en el primer baño del recién nacido. Pero todavía existía una incógnita que ha estado sobrevolado desde el principio de su embarazo y que no habían resuelto hasta hoy: el orden de apellidos que llevará su primer hijo.
No han llegado a un acuerdo entre ellos. Los dos querían que su retoño heredara Pombo o Castellano como primer apellido y ninguno ha dado su brazo a torcer. Por este motivo, ha tenido que ser el azar el que finalmente decida cuál va a ser el nombre completo del bebé. “Nosotros lo hemos hecho así, con un sorteo el día antes del parto. Hubo mucha, mucha, mucha tensión, pusimos 4 papelitos y fue al azar”, desvelaba desde la habitación del hospital cómo habían resuelto el tema.
Martín Castellano Pombo. La suerte se puso del lado de Pablo en el juego, aunque la it girl no está decidida a rendirse con su propósito. “Yo también estoy muy feliz aunque siempre va a ser Martín Pombo para los amigos”, comentaba mientras se reía y contemplaba a Pablo mirándola con el semblante serio al escuchar esta afirmación.
“Los dos hemos luchado por nuestros apellidos hasta el final”, escribía en uno de estos stories, donde también ha publicado el momento en el que el padre del niño completaba la ficha de nacimiento con lo acordado. “Estoy muy feliz”, admitía tras terminar de rellenar los datos del bebé.
Era un tema que habría generado controversia entre ellos desde el comienzo de su noviazgo. Hace tres años se ponían frente a la cámara para realizar un ‘preguntas y respuestas’ para su canal de Youtube y debatieron -entre otros- sobre este tema. La disputa se originaba instantes después de que la it girl acabara de formular esta cuestión. “Castellano sin ninguna duda”, respondía él. “Pombo sin ninguna duda”, rebatía ella. María aseguraba a sus followers que este dilema siempre les habría generado auténticos quebraderos de cabeza.
La pequeña de las Pombo recordaba al empresario que ella tenía dos hermanas y que su apellido terminaría desapareciendo si no lo ponía en primer lugar. Argumento que no convencía a Pablo, que oía como su pareja explicaba que ahora hacer el intercambio era mucho más sencillo porque había cambiado la ley y no se tenían que meter de papeleo. “Ya, pero entonces desaparece por mi lado. Este es un tema que acabamos discutiendo”, se mostraba en desacuerdo y concluía la discusión al pedir a su mujer que pasara de pregunta.