Nada tiene que ver la gestión mediática que ha hecho Paula Echevarría de su maternidad si comparamos cómo está viviendo el nacimiento de Miguel con el de Daniella Bustamante, a la que tuvo hace más de doce años durante su matrimonio con David. Primero, y por encima de todo, porque de aquella no existía Instagram. La actriz aún no había colocado en el primer puesto de su currículum el rol de it girl. Pero también, si lo miramos con perspectiva, por las diferentes formas de exponer a sus dos hijos.
Desde que comenzó a despuntar en Instagram, la intérprete decidió afrontar con naturalidad los aspectos de su vida íntima que quería compartir con sus fans, que pronto superarán los cuatro millones. Y en esa privacidad, el rey ahora es su bebé. Si dio a luz un 11 de abril, desde esa fecha que marcará para siempre el calendario vital de la asturiana no hay día en el que no nos haga partícipes de lo orgullosa que está de su pequeño. Y la prueba definitiva de que se le cae la baba con él la encontramos en su último post.
Sentada a su lado durante un trayecto en coche, Paula no dudó en inmortalizar un momentazo madre-hija en el que Miki, como le llama cariñosamente, le cogía con fuerza de su dedo índice. "Esa manita", ha comentado con ternura en esta foto a la que ya le han dado 'like' más de cien mil personas y que ha acompañado de un deseo: "Agárrate fuerte a mí".
Los comentarios a esta publicación son infinitos. Desde que Echevarría se convirtió en madre por segunda vez, su legión de fans no falta jamás, sobre todo cuando la actriz nos muestra a su bebé. Rostros conocidos como Chenoa, Cristina Pedroche, Bibiana Fernández o Marta Carriedo han querido participar de esta escena de ternura que Paloma Cuevas, íntima de la protagonista, ha definido como una instantánea "para derretirse". Pero si un comentario destaca sobre el resto, ese es el de Miguel Torres, pareja de Paula y padrre de la criatura, que ha compartido su devoción por esta imagen con un "siempre con su mami".
Este tsunami de amor virtual, sin embargo, no siempre es unaánime. Hace unos días, una escena muy similar, también en un coche, se transformó en polémica. La de Candás, como es habitual, nos mostraba un día cualquiera con su hijo Miguel. Pero la posición en la que aparentaba estar el menor dentro del vehículo pareció indignar tantísimo a sus haters que se vio obligada a dar explicaciones (con zasca incluido):