Darío, el primer hijo en común de Feliciano López y Sandra Gago, llegaba a la vida del matrimonio el pasado 4 de enero como regalo adelantado de Reyes. Desde la habitación del Hospital Quirón en la que se instalaron salían publicadas las primeras fotos del niño y la pareja, que no dudaba en hablar con los medios que esperaban su salida del centro. “Es buenísimo, nos deja a dormir a ratos”, confesaban tan solo dos días después del nacimiento. Muy recelosos de su intimidad e intentando proteger al máximo la identidad del niño, ambos han subido desde entonces muy poco contenido junto a él en las redes sociales, saltándose esta norma no escrita en contadas ocasiones. Ahora, a punto de que su hijo celebre su tercer cumplemés, la wedding planner ha enseñado cómo se encuentra su cuerpo tras dar a luz.
Lo ha hecho a través de una instantánea en bikini, colgada en blanco y negra, en la que aparece posando delante de una pared repleta de plantas. Sandra sujeta una toalla por la espalda mientras mira hacia uno de sus lados, demostrando sus dotes como modelo y evidenciando su espectacular figura pocas semanas después de ampliar la familia. A los 20 días del parto, la joven de 25 años retomó su rutina de ejercicios, realizando actividades hipopresivas que le han ayudado a recuperar su estado anterior. “Estás preciosa vida”, “Toma ya” o “Tipazo” son algunos de los comentarios que se aprecian en el tablón de este post.
Tan solo unos días después de convertirse en padre por segunda vez, Feliciano tuvo que dejar a su familia y poner rumbo a Australia por motivos laborales. Sin embargo, una vez que consolidó su papel como madre, Gago pudo hacer las maletas y acompañar a su marido a México, donde el deportista disputaba el Open de Acapulco. Este viaje en Latinoamérica ha sido el primer destino internacional de Darío, que ha disfrutado junto a sus papás del buen tiempo, la playa, la montaña y unas altas temperaturas.
A pesar de ser muy recelosos con su vida privada, la esposa del tenista aprovechaba el Día del Padre y subía una fotografía de Feliciano mirando al recién nacido cariñosamente y agarrando su bracito con sus manos. Una preciosa estampa captada en una terraza con espectaculares vistas a la naturaleza que generaba una oleada de likes y de comentarios positivos de sus seguidores. “Tiene mucha suerte con sus papis” o “Qué maravilla” eran algunos de estos mensajes dirigidos a la familia.