Cuando se habla del estilo de Lady Di, los complementos ocupan un lugar importante. Sus joyas favoritas, entre las que las perlas ocuparon un lugar especial, su colección de bolsos de lujo, con el modelo Lady Dior a la cabeza, y sus gafas de sol, de las que apenas se separaba en verano, constituyen parte importante del estilo de la que fuera Princesa de Gales.
Como icono de estilo, hoy se le reconoce el mérito de haberse adelantado a su tiempo y en lo que a gafas de sol se refiere, las que usó a lo largo de su vida pública siguen estando entre los modelos más buscados hoy.
Entre sus favoritos, clásicos como las Wayfarer de ray-Ban, modelos redondos, oversize, cat-eye o de montura blanca, protagonizaron algunos de sus looks más emblemáticos. Damos un repaso a la colección de gafas de sol de la princesa Diana, que siguen siendo tendencia hoy.
Las gafas de pasta blanca fueron sin duda una de sus favoritas. En concreto, este modelo de tipo aviador en tamaño XL de la firma Oliver Goldsmith se convirtió en uno de sus inseparables. Hoy las gafas de pasta blanca se han convertido en un clásico que sigue estando de plena actualidad.
Pero las de pasta blanca no fueron las únicas que usó Diana Spencer, otra de sus gafas preferidas fueron este modelo aviador de tamaño oversize con montura de carey y lentes en marrón degradado, que hoy resultan perfectas para hacer un guiño al estilo retro
Otro de los modelos que usó incansablemente Lady Di fueron las Wayfarer de ray-Ban, un tipo de gafas que en general sienta bien a todo el mundo, pero especialmente a quienes tienen un rostro alargado o en forma de corazón. Llevan fabricándose desde los años 50 y no hay temporada en la que no sigan siendo tendencia.
Otra de las gafas favoritas de la princesa Diana fueron el modelo redondo y mini por el que todo el mundo recuerda a John Lennon. Una apuesta que se pueden permitir las mujeres de caras cuadradas o angulosas y que Lady Di coleccionó en montura de pasta y metálica.
Uno de los modelos retro a los que recurría Diana fueron las gafas cat-eye, un estilo sofisticado de aires vintage que favorece especialmente a las mujeres de rostro redondo o en forma de rombo y que ha llegado a convertirse en un clásico incombustible.
Una de las tendencias más claras de esta temporada son las gafas rectangulares por la que apuestan firmas como Versace, Gucci o Prada, un modelo con regusto a años noventa que Diana de Gales eligió en montura de pasta y con patillas anchas.