Desde su entrada en el gobierno de la Comunidad de Madrid, el estilo de Isabel Díaz Ayuso ha experimentado una evidente evolución. Aunque siempre ha preferido elegir moda española, sus gustos han cambiado tanto en lo que respecta al colorido, como a los patrones.
Si durante la primera parte de su mandato su armario estaba compuesto por prendas holgadas de largo midi, con una clara predilección por los vestidos amplios, los tejidos plisados y los cortes evasé, tras el verano de 2021 sus apuestas se volvieron más sofisticadas, con siluetas más ajustadas, abundancia de trajes sastre, cortes más atrevidos y, en definitiva, un estilo más juvenil y actual.
Si detrás de estas decisiones estilísticas hay o no asesoramiento profesional es todo un misterio, lo que está claro es que el nuevo estilo de la presidenta despierta interés ya sea en los actos meramente políticos, como en las grandes ocasiones. Estas son las claves de cómo ha evolucionado el estilo de Isabel Díaz Ayuso.
El vestido tipo chaleco fue su auténtico amuleto durante la campaña electoral que la llevó a la presidencia de la Comunidad de Madrid. Se hizo con el mismo modelo en tres colores, que generalmente combinaba con blazer y zapatos de salón o botas de tacón y tanto uso les dio, que llegaron a llamarlo el ‘vestido de la buena suerte’.
También en aquel momento era fan absoluta de los vestidos holgados de largo midi, a menudo en tejidos plisados o estampados, que ajustaba a su silueta con un cinturón y que solía combinar con americanas. Lo cierto es que se trata de una prenda poco favorecedora que decidió desterrar de su armario.
Sus apuestas para actos menos formales seguían directrices similares a las apuntadas, es decir, predilección por prendas de largo midi, preferencia por las faldas plisadas y en escasas ocasiones, algún pantalón de corte amplio.
El patrón de sus vestidos para los grandes eventos también seguía siempre las mismas pautas: tejidos fluidos, cuerpo ablusado, escote de pico, falda con mucha caída y largo hasta los pies. Looks poco actuales y no demasiado favorecedores.
Entre las nuevas apuestas de Isabel Díaz Ayuso han ganado terreno los pantalones sastre, los ajustados y las faldas rectas, prendas que suele combinar con chaquetas y con las que se ve mucho más favorecida, actual y juvenil.
El verano de 2021 supuso un punto de inflexión en el estilo de la presidenta de la Comunidad de Madrid que, dando muestras de mayor confianza, empezó a atreverse a lucir figura con vestidos más ajustados a su silueta, muchos de ellos firmados por Vicky Martín Berrocal.
A medida que pasaban los meses, este cambio de rumbo en su estilo se ha hecho más evidente y sus apuestas mucho más sofisticadas y arriesgadas, dando cabida en su armario a prendas más juveniles y favorecedores en las que el color negro ha empezado a tener un gran peso. También sorprendió con un corte de pelo y un ligero cambio de color con mechas que le quitaban años y le aportaban frescura.
Esta nueva forma de vestir se ha mantenido en el tiempo y sus elecciones están muy alejadas de aquellos vestidos de largo midi tan poco favorecedores. Desde hace un tiempo además de las faldas y vestidos ajustados, ha incluido entre sus esenciales los pantalones tanto anchos como pitillo o de estilo culotte.
Y por supuesto, no faltan en su armario varios trajes sastre, tanto de dos como de tres piezas en colores neutros como el blanco y negro que son además especialmente combinables. Esta nueva incorporación a su armario hace pensar que presta mayor interés a las tendencias de la calle e incluso al estilo de las influencers.
Las nuevas preferencias de Isabel Díaz Ayuso también son evidentes cuando se trata de vestir para grandes eventos, para los que ha introducido elementos antes impensables como los escotes asimétricos, las plumas o las lentejuelas que están más en línea con las tendencias actuales.