En un momento en el que las tendencias son más efímeras que nunca, resulta complicado que haya una que sobreviva al paso de los años, pero en el caso del ‘old money’ podría decirse que es una de las pocas que cada temporada logra hacerse un hueco en la industria. Inspirado en la elegancia atemporal de las élites adineradas de antaño, este look evoca una sofisticación clásica y una sensación de herencia y linaje. Resulta perfecto a la hora de conferir un toque de distinción a los estilismos del día a día sin tener que recurrir a demasiadas estridencias. Porque la clave de su éxito reside precisamente en la capacidad de elevar los estilismos con prendas básicas.
Firmas como Ralph Lauren, Tommy Hilfiger, Brooks Brothers, Burberry y J.Crew son ejemplos muy significativos que capturan perfectamente la esencia del estilo ‘old money’. Donde los tejidos sobrios y tonalidades discretas son dos de los puntos clave en cada una de sus colecciones a medio camino entre lo preppy y el british en donde cada detalle cuenta. Incorporarlo al vestidor no tiene por qué resultar complicado siempre y cuando se sigan varias premisas que se explican a continuación.
En primer lugar, la clave para emular el estilo 'old money' reside en hacer parecer que te vistes sin esfuerzo. Aunque cada pieza puede estar meticulosamente seleccionada, el resultado final debe ser una apariencia relajada y natural.
Invierte en prendas atemporales y de calidad que perduren en el tiempo. Un abrigo de lana bien cortado, una camisa blanca de algodón egipcio o un vestido de corte recto son esenciales en el guardarropa 'old money'. Estas piezas, aunque pueden requerir una inversión inicial, se convierten en apuestas a largo plazo.
Cuanto más sutil y simple, mejor. No hay nada como una confección impoluta, con cortes limpios y patrones cuidados donde los tejidos destilen calidad. Los colores neutros como el beige, el blanco roto y el gris perla son la base perfecta para este estilo, creando así una paleta refinada que destaca por su sencillez.
Una de las premisas que hay que tener claras es que cada detalle, cuenta: botones de calidad, ribetes, solapas, cuellos estructurados, bordados… Todo aquello que haga ver que cada prenda está muy trabajada.
Las élites adineradas que popularizaron el estilo ‘old money’ a menudo tienen una afinidad por los deportes al aire libre y la vida campestre. Por eso no pueden faltar piezas relacionadas con este estilo de vida como gabardinas, botas de montar o suéteres de lana que aporte un toque sporty classic al estilismo.
Además, no pueden faltar los accesorios de tintes clásicos como joyería con perlas, finas cadenas, pañuelos de seda, cinturones o gorras. No hay que olvidar tampoco que los estampados cobran un papel importante: desde la pata de gallo a los cuadros, las rayas verticales o el tartán.