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Con apenas veinticinco años, Sara Baceiredo -como se la conoce en redes, Sara Bace-, no para. Más allá de ser una influencer al uso, la de Vitoria puede presumir de ser una joven empresaria que se está haciendo camino en el mundo de la moda y que también triunfa en el sector Lifestyle gracias a sus contenidos enfocados al deporte y la vida sana. Hace ya cuatro años que dejó su ciudad natal para mudarse a Madrid, y así gestionar su firma de bolsos ‘It’s Lava’ con más facilidad. En ese momento empezaron también a subir sus seguidores en Instagram y Youtube, donde ya cuenta con casi medio millón de seguidores, ha estado nominada en los recientes Premios Ídolo, y por si fuera poco, y las firmas a día de hoy se la rifan. Hablamos con ella de todo eso y mucho más.
Casi medio millón de seguidores en IG y otros tantos en Youtube. ¿Cómo llevas esta fama en redes?
Entre broma y broma casi llevo diez años en redes de una manera u otra y mi crecimiento ha sido muy natural, nunca he vivido un fenómeno como pasa hoy en día donde un contenido se viraliza y de repente ya eres famoso (ríe). Ha sido tan orgánico y muy paulatino que me ha hecho llevar muy bien esta vida, como quien dice. En el día a día, apenas soy consciente de ello, prácticamente todas las personas que me rodean son ajenas al mundo influencer.
¿Cómo fueron tus inicios?
Cuando tenía catorce años abrí junto a una amiga de natación un blog en la plataforma ‘Blogger’, más adelante me abrí el mío propio donde subía fotos de mis looks y hablaba sobre mis viajes y los modelitos que escogía para ocasión. De hecho, ese blog sigue abierto al público… me da auténtica vergüenza, pero son mis comienzos y no quiero esconderlo (ríe). A los pocos meses de tener el Vlog me abrí mi actual canal de Youtube, ya que efectivamente me di cuenta de que lo mío no era escribir, sino hablar, hablar y hablar… A partir de ahí ya todo fue un círculo vicioso. La gente de Youtube empezó a seguirme en Instagram, otros al revés, y con los años poco a poco fui creciendo… ¡Hasta hoy!
Si no te dedicases a las redes, ¿cuál sería tu trabajo soñado?
Yo de lunes a viernes me dedico a mi marca ‘It’s lava’, donde llevo la dirección creativa y la parte administrativa. Es verdad que al final mi trabajo en redes me quita bastante tiempo, pero en la medida de lo posible intento que sea tiempo de mis findes o mis ratos libres. Ahora mismo mi objetivo es crecer como empresaria, hacer que la firma crezca y que todas las personas que trabajan conmigo también se desarrollen profesionalmente. Lo que me gusta de mis redes sociales es que muestran todo esto, no una vida idílica, sino una vida real. ¡Aunque no digo que no sea maravillosa!
Ahora también diseñas bolsos ¿Con qué faceta te quedas, influencer o diseñadora?
Por suerte yo no soy la diseñadora. Tengo un equipazo donde cada una tiene un rol marcado para que todo vaya sobre ruedas, incluso cuando yo no estoy. Pero como he dicho antes, me quedo con mi faceta de CEO.
¿Lees los comentarios negativos sobre ti? ¿Qué les dirías a tus haters?
Diría que leo el 30% de todos los comentarios. Más que nada porque entre tantas plataformas, tanto contenido y el poco tiempo libre que tengo, no doy para más. Por suerte, ni un 0,1% de esos comentarios son malos, y si los hay son en algún post viral o video de TikTok, donde por algoritmos apareces en pantallas de personas que no saben ni quién eres ni empatizan contigo, así que me importan un pimiento. Mi gente real es la gente de Youtube y el 99% de Instagram. Estas personas sé que si critican algo, es desde el respeto.
¿Tienes más tacones o zapatillas?
Ni la una ni la otra jajaja pero diría zapatillas, no aguanto los tacones. Mi calzado comodín son las botas, todas las alturas, tipos y formas.
¿Cazadoras de cuero o blazers?
Bufff… ¿blazers?
Vestidos: ¿midi o XXS?
Midi, sin duda.
Tu look perfecto en un día que tienes varios eventos.
Falda larga con botas, un top especial con una blazer más o menos elegante en función del plan y muchos accesorios: bolso obviamente, anillos y collares, pendientes XXL y gafas de sol.
Tu tendencia favorita
Total denim.
Y la que no te pondrías nunca.
Creo que un pantalón pirata. Aunque seguro que termino cayendo, ¡siempre caigo! (ríe).
Un look que te arrepientas de haber llevado.
¡Ninguno!
La celebrity cuyo estilo te sirva de inspiración.
Matilda Djerf. Cuando me complico la vida vistiéndome con mil capas y colores pienso en que ella se planta unos vaqueros rectos y una camisa blanca y va divina. Me viene bien para equilibrarme un poco.
¿Alguna vez te has inventado una excusa para no trabajar con una marca?
Seguramente si, antes me costaba decir que no porque igual no iba con mi estilo o valores, ahora soy sincera porque yo mismo tengo más claro lo que quiero y lo que no.
En un mundo de redes sociales, ¿has tenido alguna vez una cita Tinder?
¡Nunca! (ríe). Llevo ennoviada desde los diecisiete…
Tres virtudes de Sara Bace.
Me considero muy disciplinada, sonriente y “sé estar” en cualquier situación con cualquier persona.
Y tres defectos...
Maniática, impaciente y muy dura conmigo misma.
Tu destino soñado.
¡Japón y Australia! Tengo mil ganas de ir, pero quiero reservar estos destinos para algún momento especial.
Un viaje que no repetirías.
Creo que no volvería a Hawaii, aunque nunca digas nunca. Pero me parece un destino excesivamente caro, muy muy lejano y nada cómodo para desplazarte. Hay paisajes impresionantes, pero también hay muchos paisajes increíbles por descubrir en otras partes del mundo.
Un secreto de belleza con el que te sientas espléndida.
Piel hidratada, un toque de colorete en crema para que parezca que te ha dado el sol, y ya. Cuanto más natural, ¡mejor!
El capricho más caro que te has dado.
Una buena maleta de mano. Siempre estoy viajando y siempre voy con equipaje de cabina. Así que me venía al pelo.
Tu amor platónico.
Mi novio, ¡por supuesto!
¿Cómo te ves en 10 años?
Espero que muy muy feliz, con estabilidad mental y económica, una familia y un buen trabajo.
¿El último momento en el que pensaste ‘tierra trágame’?
Las situaciones embarazosas me dan mucha risa, no suelo pasar vergüenza, me rio de mí misma y pienso en que podría ser la protagonista de una comedia romántica.