La reina Letizia está renovando su armario de primavera verano, pues son ya varias las prendas que le hemos lucir por primera vez en sus últimas apariciones, antes de poner rumbo a sus vacaciones en Mallorca. Carolina Herrera es una firma que lleva años formando parte del vestidor de Letizia y hoy hemos descubierto que ha sumado una nueva pieza de la insignia de origen venezolano. La esposa de Felipe VI ha viajado a Barcelona para estar presente en la Reunión Anual de Directores de Centros del Instituto Cervantes y ha escogido un look con el que ha querido hacer un guiño al pueblo catalán.
La reina Letizia, que se mueve muy bien entre las tendencias y su impronta más regia, ha optado esta vez por un estilismo clásico. Se trata de un vestido de esos que podría repetir dentro de unos años, como le gusta hacer a ella, sin que pierda actualidad y conservando el equilibrio perfecto que se ha logrado en su diseño entre la frescura y la elegancia. Para este acto Letizia ha escogido un vestido camisero de fondo blanco estampado con flores de color morado.
Esta es una pieza realizada en crepé de chine mezcla de seda con cuerpo entallado, falda con volumen y pliegues en el delantero y estampado floral a contraste. Presenta cuello camisero, cierre de tapeta oculta con botones y manga larga con puño camisero, que la reina ha llevado levemente remangadas, y gemelos de perla. Además incorpora bolsillos laterales y lazo a tono en la cintura del mismo tejido que la prenda. Esta vez la reina ha llevado esta pieza, que está a la venta por 850 euros en la web de la firma, tal y como se vende al público. Y es que en otras ocasiones, tanto a ella como a sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, se le modifican las prendas que lucen para adaptarlas al protocolo real, algo que también hizo Kate Middleton, el día de su aparición en Wimbledon. Lo ha llevado con las sandalias de tacón sensato de Padded-Strap Block, de Boss, con un precio de 250 euros.
Aunque el vestido que ha lucido la madre de la Princesa de Asturias resulta llamativo por su estampado, ha habido otro elemento que también ha llamado mucho la atención. Y es que la reina ha querido mostrar su afecto al pueblo catalán, con el que tuvo la oportunidad de estar también hace unas semanas en la celebración de los Premios Princesa de Girona. Ha encontrado la manera de hacer esta deferencia a través de sus pendientes pues ha escogido unas piezas diseñadas por Tous, una de las firmas de joyería catalana más conocidas.
Letizia ha rescatado para la ocasión unas piezas que ya estaban en su joyero. Son unos pendientes, modelo exclusivo para ella, diseñados en oro blanco de 18 quilates, diamantes de 0.13 quilates y perlas cultivadas de agua dulce. Se los pudimos ver en 2018 durante una audiencia en Zarzuela al al equipo olímpico español que participó en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang 2018, resulta curioso que justo los haya lucido la misma semana en la que viajará a París para presenciar la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París 2024.
Cabe destacar que el 'idilio estilístico' de la reina con la firma catalana se ha fraguado de forma orgánica, ya que son muchas las piezas que la reina ha lucido, muchas de ellas diseñadas en exclusiva por Rosa Oriol, vicepresidenta de la joyería, para ella, como unos pendientes de cuarzo verde y rubíes (imagen izquierda) u otros, largos, de esmeraldas.