Gran Canaria Swim Week ha cerrado sus tres días de desfiles de moda de baño anticipando las que serán las tendencias en bañadores y bikinis del próximo verano en la única pasarela profesional de baño europea.
Con un total de casi 40 marcas, entre las que se encuentran firmas emergentes y consagradas, han celebrado el 25 aniversario de esta cita anual cuyo objetivo es reforzar los puntos débiles de la industria textil, incentivar a la creación de empresas y mejorar la cualificación del sector de la moda de baño.
Uno de los momentos más especiales fue el desfile benéfico ‘We Swim Together’ el pasado día 19 de octubre que, coincidiendo con el Día Internacional del Cáncer de Mama, se dedicó en exclusiva a las colecciones adaptadas a las consecuencias físicas del cáncer de mama con firmas de prestigio como Ágatha Ruiz de la Prada, Dolores Cortés, Como la Trucha al Trucho o Bohodot, entre muchas otras.
Estas son las propuestas de la pasarela Gran Canaria Swim Week, que ha contado con el actor Kerem Bürsin como embajador de excepción.
El calendario oficial se abría con el desfile de la firma Laut, ganadora del premio colección emergente de la pasada edición. La firma presentó 19 looks muy urbanos con protagonismo absoluto de los estampados tropicales y el animal print.
La firma Suharz apuesta por el verde como protagonista de su colección con un trasfondo de conciencia medioambiental mediante el uso de tejidos reciclados, mezclando conceptos antagónicos: la rudeza del estampado de camuflaje con la delicadeza del tul plumetti.
Román Peralta se inspira en la estética de los pueblos nómadas del Sahara. Una colección en la que dominan los cortes asimétricos, el juego de luces creado mediante tejidos opacos y semitransparentes y un colorido dominado por los colores del desierto y el pueblo tuareg.
La colección de Diazar se inspira en los códigos de la época clásica, aunque los reinterpreta con una visión actual en looks femeninos, masculinos y sin género. El blanco y los metalizados se erigen en protagonistas de sus prendas que recuerdan a piezas de lencería.
Flores, estampados geométricos, cuadros de vichy, cashemere, brillos y mucho color. El espíritu boho está presente en toda la colección de Bohodot, que busca la comodidad y reivindica la libertad de todas las mujeres que la inspiran.
La firma TCN regresa a sus orígenes con una colección inspirada en Gala, la musa de Dalí. Las rayas y los cuadros se convierten en los grandes protagonistas, sin perder de vista la sobriedad que caracteriza a la firma catalana.
En su línea divertida, Como la trucha al trucho apuesta por una paleta de color en la que amarillos y naranjas, verdes y azules trasladaban al ambiente cálido de los días y tardes del verano.
La firma Alawa hace del optimismo el hilo conductor de su colección con una cromática llena de colores vibrantes y un patronaje heredado de la alta costura salpicado de volantes, drapeados y bordados.
Las propuestas de Carlos San Juan están llenas de alusiones orgánicas, desde las texturas al color, que funde en forma de degradados los tonos rosas de la orquídea con el verde de la jungla o el azul astral.
Elena Morales ha creado una colección fundamentalmente versátil y funcional, con prendas a las que se puede dar una segunda vida, creando looks que van más allá de la playa o la piscina. Sus propuestas le han valido el premio L’Oreal a la mejor colección sostenible.
La colección de Dolores Cortés es un viaje al Amazonia en la que los tonos vivos y los estampados selváticos, el animal print y el verde kaki, se erigen como auténticos protagonistas del verano más cálido.
Las propuestas para el próximo verano de Chela Clo son una apuesta por el color y la alegría. La firma ha recuperado los diseños retro característicos de la marca, con marcada inspiración mediterránea y tropical.
La colección de Bloomers, la firma creada por la modelo Laura Sánchez, tiene dos líneas muy definidas: la primera, compuesta por tops bandeau y las braguitas culotte características de la marca y la segunda, mucho más sofisticada, en la que abundan los tops de triángulo y los bikinis reversibles.
La fauna canaria es la protagonista de la colección de Vevas, que incluye como estampados cuatro especies autóctonas de las islas: el pinzón azul, el pejeverde, el lagarto canario y el presa canario. Todas sus prendas se caracterizan por adaptarse a todos los cuerpos y estilos de mujer.
Los diseños de Rubén Rodríguez se inspiran en personajes de la mitología griega y en sus prendas abundan los cortes rectos y asimétricos. La paleta de color tiene como protagonistas el blanco, el azul bebe, el gris, el violeta y el dorado.
La colección de Liberrimo destaca por el audaz trabajo de patronaje de influencia claramente orgánica y por el uso experimental del color, las texturas y estampados en piezas tanto femeninas como masculinas.
Inspirada en el atardecer de un jardín japonés y en la cultura nipona, la colección de Guillermina Baeza utiliza la paleta de color del cielo al anochecer e incorpora tejidos y estampados que recuerdan a pergaminos de hojas prensadas y fragmentos de cerámica.
Fiel a sus señas de identidad, Como un pez en el agua presenta una colección muy femenina, compuesta por piezas artesanas muy originales en las que los fruncidos y los volantes son los verdaderos protagonistas.
La colección de Miss Bikini Luxe está inspirada por mundos exóticos y naturalezas exuberantes con uso abundante de estampados étnico, animal print y motivos ornamentales de inspiración india.
La colección de All that she loves se inspira en los cuatro elementos básicos: agua, fuego, tierra y aire. Estos elementos se manifiestan a través de las texturas, los colores y el uso de técnicas como el tie-dye para tintar los tejidos.
Acompañado de música de rap, Maldito Sweet ha presentado una colección sexy de inspiración lencera y con mucho color, donde los bordados y encajes se combinan con cadenas, argollas, pompones y las chapitas doradas que caracterizan a la marca.
La colección de Melissa Olabash está creada para esculpir y realzar la silueta femenina mediante el uso líneas limpias y tejidos sostenibles y técnicas innovadoras que se adaptan a todos los cuerpos y estilos de mujer.
La colección de Gonzales, que le ha valido el premio L’Oreal a la mejor colección, está inspirada en La India, en China, en el norte de África, con mucho espacio para piezas de lencería, de las ligas a los corsés, e incluyendo ciertas alusiones al bondage.
Las propuestas de Mama María apuestan por los diseños retro de los años 50, que se combinan con tejidos y patrones nuevos. Metalizados, estampados de lunares, cuadros de vichy, rayas marineras y animal print se mezclan con tejidos lisos de tonos cálidos entre los que destacan el marrón, el naranja y el violeta.
En la última jornada de Gran Canaria Swim Week, Aurelia Gil ha presentado una colección con la jungla tropical como gran protagonista, acompañada de una paleta de color que va del clarísimo vainilla al negro profundo y en la que los cortes cut-out se mezclan con patrones minimalistas.
La colección de Ágatha Ruíz de la Prada incorpora la iconografía clásica de la firma tanto en mezclas de color, como en el uso de sus estampados, entre los que destacan las flores en 3D, olas, corazones, nubes y rayas gruesas de colores.
El hilo conductor de la colección de Pedro Palmas son las vidrieras modernistas de la iglesia británica de St. Andrew en Sheringham, a través de las que pretende captar la luz. Los patrones de sus piezas, que juegan con las simetrías y asimetrías, también combinan los estilos clásico y modernista.
La firma Bo Star vuelve a sus raíces incluyendo en su colección para el próximo verano algunos de sus motivos clásicos. Lazos, volantes, ribetes de lurex y combinaciones en tonos pastel y estampados geométricos se incorporan a patrones retro y siluetas asimétricas.
La firma Arcadinas apuesta por una colección de esenciales, con patrones minimalistas que se adaptan al cuerpo y un colorido amplio que se adapta a cualquier tono de piel e incluso a cualquier estado de ánimo.
La colección de Alexandra Miro se define por el detalle con una apuesta por el color, el estampado y el diseño escultórico. Escotes profundos, patrones que afilan la silueta y piezas ligeras y sensuales para después del baño hablan de lujo y feminidad.
Las propuestas de Oye Swimwear difumina los límites entre el baño y la ropa de noche con un colorido muy cercano a Oriente y patrones en los que las asimetrías, los drapeados y los escotes de vértico adquieren todo el protagonismo.
Nuria González hace una apuesta muy íntima y con la mirada puesta en su taller, apuesta por piezas gráficas y patrones de talles muy altos inspirados en los bañadores y bikinis de los años 90.