Desde que Tamara Gorro anunció su separación temporal, él optó por mantenerse en silencio. Prácticamente no existen declaraciones de Ezequiel Garay en este impass que tuvo en su matrimonio con la madre de sus hijos. Tampoco cuando hicieron pública su decisión de retomar su relación y darse una segunda oportunidad. Sin embargo, el testimonio en 'Sálvame' de alguien que al parecer forma parte de su entorno le ha forzado a pronunciarse a través de un extenso comunicado. En él, el exfutbolista zanja punto por punto las acusaciones que esta persona de la que se desconoce su identidad ha vertido sobre él y su mujer, a la que se ha llegado a acusar de monetizar los problemas de salud mental a los que se ha enfrentado en este último año.
"Nunca he hecho ninguna declaración sobre lo que lleva sucediendo estos meses. Pero es el momento de hacerlo, porque creo que todo tiene un límite y se está sobrepasando", comienza este texto firmado por el argentino. Su intención con el mismo es manifestar lo contradictorio que es que con su ruptura recibiesen "mensajes de pena, tristeza y apoyo, mucho apoyo" por parte de sus seguidores y de los medios de comunicación y que ahora que vuelven a estar juntos se diga públicamente que "TODO era una mentira y nadie se alegre" por ellos.
"Estamos viviendo en un mundo al revés, en el que prevalece lo malo, sobre lo bueno. Nos alegramos cuando a las personas les va mal y criticamos cuando les va bien", ha criticado. Y esto le ha pasado factura a nivel personal.
En los días posteriores a hacerse pública su fuerte crisis con Tamara Gorro, el exjugador de fútbol tuvo "que aguantar cómo se especulaba" sobre él "con MENTIRAS", cómo se les daba voz "a personas que inventan todo para hacer daño". Y no quiso entrar. Lo que no va a consentir, tal y como deja claro en el comunicado, es que se insinúe que la enfermedad de su mujer "es una farsa".
La influencer, que ha sido diagnosticada de depresión en estado severo y de un trastorno de ansiedad del que se encuentra en pleno tratamiento, fue la encargada de compartir con su familia virtual este proceso. Sin embargo, hubo ciertos usuarios que no la entendieron, incluso que la criticaron y juzgaron por su comportamiento en redes.
"¿Tiene que suicidarse como por desgracia en otros casos, para que se sepa que es verdad? ¿Qué narices está pasando en este mundo? OJALÁ fuese una mentira, porque no le deseo a nadie lo que ella está viviendo desde hace años, y por supuesto yo también como compañero de vida. Pero como ahora empieza a sonreír, ya no vale, ya es mentira…", ha denunciado Ezequiel.
A modo de petición, un Garay muy enfadado ha suplicado que se deje a la gente ser "feliz", que no se "dude" de las enfermedades mentales, que cuando alguien está inmerso en esto pueda tener la "oportunidad de sonreír al menos cinco benditos minutos". "Dejemos que la gente se pelee, se arreglen o se separen de por vida, dejemos a la gente VIVIR su vida. Estoy convencido de que viviremos en un mundo mucho mejor", ha augurado.
Recordemos que poner sobre la mesa la posibilidad del suicidio no es casual. La propia Tamara Gorro aseguró que pensó en quitarse la vida en una reciente conversación con Anne Igartiburu. En ella, tal y como puedes ver en el vídeo, la creadora de contenido contó cuál era el punto en el que se encontraba para que se le llegase a pasar por la cabeza. Algo que, según ella, jamás podrá perdonarse.
"Buenos días a todos,
Nunca he hecho ninguna declaración sobre lo que lleva sucediendo estos meses. Pero es el momento de hacerlo, porque creo que todo tiene un límite y se está sobrepasando.
Cuando mi mujer y yo nos separamos, recibía miles y miles de mensajes de pena, tristeza y apoyo, mucho apoyo… incluidos los medios de comunicación.
Hoy estamos juntos de nuevo y se está diciendo que TODO era una mentira y nadie se alegra.
Estamos viviendo en un mundo al revés, en el que prevalece lo malo, sobre lo bueno. Nos alegramos cuando a las personas les va mal y criticamos cuando les va bien.
Pongámonos de acuerdo, por favor, y demos ejemplo a esta sociedad y a las nuevas generaciones.
Tuve que aguantar cómo se especulaba sobre mí y mi separación con MENTIRAS. Dando voz a personas que inventan todo para hacer daño, qué triste.
También quiero decir que estoy cansado de que se insinúe que la ENFERMEDAD de mi mujer es una farsa.
¿Tiene que suicidarse como por desgracia en otros casos, para que se sepa que es verdad?
¿Qué narices está pasando en este mundo?
OJALÁ fuese una mentira, porque no le deseo a nadie lo que ella está viviendo desde hace años, y por supuesto yo también como compañero de vida.
Pero como ahora empieza a sonreír, ya no vale, ya es mentira…
Todo esto es lo que provoca que no se avance en las enfermedades mentales, LA DUDA.
Dejemos que la gente sea feliz, que enfermen y tengan la oportunidad de sonreír para siempre o al menos cinco benditos minutos.
Dejemos que la gente se pelee, se arreglen o se separen de por vida, dejemos a la gente VIVIR su vida.
Estoy convencido de que viviremos en un mundo mucho mejor.
Termino diciendo que respeto el trabajo y opinión de cada uno (incluidos los medios) y así siempre lo mostré, pero la mentira NO.
Muchas gracias.
Sed felices"