Quién nos iba a decir este jueves, cuando Tamara Falcó anunció a bombo y platillo que Íñigo Onieva le había pedido matrimonio después de dos años de relación, que veríamos unas imágenes como las del vídeo que acompaña a esta noticia. En él, el empresario aparece besándose apasionadamente con otra mujer que no es su novia en un conocido festival celebrado en Nevada, Estados Unidos. Un documento audiovisual que fue grabado apenas dos semanas antes de comprometerse con su futura mujer y que podría hacer peligrar sus planes de futuro en común.
Que ese enlace que ya tenía fecha (17 de junio de 2023) pueda no llegar a producirse no lo decimos nosotros. Tan solo hay que recordar lo que verbalizó la novia hace unos meses sobre qué pasaría de demostrarse que su chico le fuese desleal con otra mujer.
A pesar de que en esta ocasión hay pruebas gráficas, no es la primera vez que Tamara Falcó se enfrenta a comentarios relacionados con su novio e infidelidades. Siempre firme en su defensa, la hija de Isabel Preysler comentaba hace unos meses que en su casa no había problemas "por mucho que se empeñen". Aunque aseguró que no estaba al tanto de todos los rumores, sí era consciente de que la polémica empezó un día en el que "una persona particular dijo en la tele haberlo visto con otra".
Con la serenidad que le caracteriza, Tamara explicaba que estaba viviendo "un acoso" por parte de la prensa cada vez que salía un rumor sobre una posible infidelidad. Y por eso, en marzo de este mismo año, la marquesa de Griñón volvía a confirmar que tanto ella como su ahora prometido estaban "superseguros" de la fidelidad del otro.
Sin embargo, hubo un día en el que sí hizo hipótesis sobre cuál sería su actitud de demostrarse alguna de estas informaciones (como ha sucedido ahora). En una entrevista para la revista Lecturas, la hermana de Enrique Iglesias adelantó que no le gustaría verse "en la tesitura" de tener que hacer frente a pruebas que confirmasen una infidelidad por parte del ingeniero.
Poniéndose en el papel de que algo así ocurriese, la hija de Carlos Falcó explicó que para ella era distinto perdonar una infidelidad durante un noviazgo, "que es el momento de conocer a la persona", a cuando ya estás "casada, con niños y tal". "Siempre es dolorísimo", aseguró si le ocurriese en cualquiera de las dos situaciones. Unas palabras que ahora suenan con más fuerza porque, hace tan solo unas horas, Tamara Falcó gritaba a los cuatro vientos su 'sí, quiero' a Iñigo Onieva.