Su reconciliación con Íñigo Onieva es el giro de guion que nadie esperaba. Sobre todo porque Tamara Falcó, la protagonista de esta noticia, juró y perjuró que jamás le daría una segunda oportunidad al que durante 48 horas fue su prometido. Pero se obró el milagro. El "milagro navideño", lo califica su entorno. Ese que ha confirmado a la revista ¡Hola! que la marquesa de Griñón ha vuelto con su ex. Aunque este inesperado acercamiento era algo que llevaba días rumoreándose, el hecho de que haya sido la revista de cabecera del clan Preysler quien haya dado por buena la información ya es un garante de fiabilidad. Pero hay (muchos) datos y fotografías que lo avalan.
Dada la magnitud de la noticia, la edición del ¡Hola! de este miércoles, la siguiente a la que nos hizo saber del final definitivo entre Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, ha adelantado por unas horas su publicación en la versión web. Y lo ha hecho confirmando que el noviazgo entre Tamara e Íñigo continúa. "Tal vez ahora con otro ritmo, poco a poco, más conscientes de cada paso que van dando y sin precipitar sus decisiones", afirman. Pero convencidos de retomar esos planes de futuro que desecharon en septiembre de este año.
Para entender el porqué de esta vuelta hay que trazar una cronología. Según el medio ya mencionado, hace meses que la por entonces expareja decidió "enterrar el hacha de guerra" y recuperar "una mínima cordialidad". Aunque la aristócrata siempre se mantuvo firme en cada una de sus apariciones públicas, esas en las que siempre manifestaba su negativa a retomar todo vínculo con el empresario, parece que hace tiempo que se reestableció la comunicación por mensajes de texto.
En noviembre, siguiendo la información que maneja la revista, se produjo su primer encuentro cara a cara. Y fue "secreto". "Conversaron durante horas y, finalmente, Tamara, animada por el espíritu navideño (paz, concordia, conciliación…), le propuso a Íñigo que asistieran juntos a la misa de gallo", cuentan. Esa que tuvo lugar este 24 de diciembre en la parroquia de Puerta de Hierro de Madrid de la que tanto se ha hablado esta última semana y en la que se pudo ver a juntos a Falcó y Onieva.
Sin embargo, el acercamiento definitivo se produjo en la madrugada del 31 de diciembre, poco después de dar la bienvenida al 2023. "Pasadas las doce de la noche (y, probablemente, después de una llamada de teléfono para felicitarse mutuamente el nuevo año), Íñigo Onieva sale de su casa del centro de Madrid y se sube en su moto. Cruza la ciudad, se dirige hacia Puerta de Hierro y, cuando llega a la famosa casa de la calle Miraflores, el portón está abierto para dejarle entrar", detallan los compañeros de la revista.
Una segunda oportunidad que llega tres meses y medio después de la publicación del polémico vídeo en el que Íñigo Onieva le es infiel a la hija de Isabel Preysler. Un filtración que se produjo tan solo horas después de haber anunciado su compromiso.
La aristócrata no tardó en dar la cara para compartir públicamente su decisión de separarse al descubrir una cara inédita de su pareja, mostrándose agradecida con todos aquellos que habían intentado abrirle los ojos con anterioridad. El empresario, por su parte, asumió la culpa y pidió perdón a la que fue su prometida y a toda su familia tras demostrar "una actitud inaceptable".
Todas las noticias que nos han ido llegando en este tiempo sobre Onieva apuntaban a su incansable lucha por recuperar a Tamara. Ella, mientras tanto, nos dejaba entrever con sus movimientos que la decisión que había tomado era irrevocable. Sobre todo, en las últimas semanas, cuando confirmó que tenía algo más que una simple amistad con Hugo Arévalo, un amigo de su ex, algo que no le hizo ninguna gracia a Íñigo, tal y como puedes comprobar en el vídeo situado sobre este párrafo.