Elena Tablada va "a por todas" contra Javier Ungría. Así lo ha expresado en su último encuentro con la prensa, donde se ha mostrado más dura que nunca contra el padre de su hija Camila. Tras pasar su primer Día de la madre separada y después de varias semanas en las que se ha hablado mucho de su guerra judicial con su ex, la cubana ha decidido que la alfombra roja de 'Casa MÓ: El festival' era el espacio perfecto para dar la cara y compartir con el mundo su versión.
Fue Semana el primer medio en publicar que ambos habían puesto en marcha un proceso judicial un año después de su separación. Lo que aseguraron fuentes del entorno del ya roto matrimonio fue que se habían producido "muchas diferencias por cuestiones financieras" y que ella iba "a pedir todo el dinero que pueda". ¿El motivo que se filtró en su momento? "Reclamar la cantidad que considera necesaria para estar a la altura de la calidad de vida que ha disfrutado" durante su relación.
Ante estas informaciones, Tablada se ha visto obligada a hablar. Después de que su amiga Tamara Gorro la defendiese y explicase 'su verdad' ("Él es el que demanda a Elena Tablada. Ella no pide ninguna pensión compensatoria, por lo tanto, no quiere dinero. Lo único que quiere es que si la niña vivía con, pongamos, diez euros, siga viviendo con diez euros, por ambas partes. Quien pide dinero es él a ella a una cuenta mancomunada"), por fin tenemos las primeras palabras de la protagonista de la noticia.
"Solo quiero lo mejor para mis hijas y que mis hijas estén juntas y se críen unidas", ha manifestado, confirmando así lo que dijo en su día la colaboradora. "Yo no sé de dónde ha salido lo que se ha dicho. Muy poco me quiere mi entorno si ha dicho eso de mí", ha declarado, desmintiendo así lo publicado. Ahora, su único objetivo es lograr el bienestar tanto de Camila, que le unirá para siempre a Javier Ungría, como de Ella Bisbal, la hermana mayor: "Voy a por todas. Por supuesto que creo en la justicia, y sobre todo creo en Dios y en el universo".
Más allá de lo judicial, escuchar a Elena Tablada hablando de su exmarido, con el que estuvo casada hasta agosto de 2022, es una forma de comprobar su profunda decepción con el empresario. "Creo que me va a costar mucho volver a confiar en un hombre, la verdad. Pensaba que no me habían engañado, pero hasta para eso estaba engañada. Van habiendo revelaciones, pero eso ya no importa, porque no existe ninguna relación. Enterarte a toro pasado de cosas no sirve de nada", ha explicado con total sinceridad.