Dos meses han pasado desde que se hizo pública la separación de Alejandro Sanz y Rachel Valdés. La noticia coincidió en el tiempo con la confesión más sincera del artista, que quiso compartir con sus fans que se sentía "triste y cansado" y que, a veces, no quería, "literalmente, ni estar". Poco después explicó que había sufrido "un brote muy fuerte" y que se había llegado a plantear cancelar la gira por problemas de salud mental. Sin embargo decidió seguir adelante y terminar su gira en España, lo que para él fue una auténtica "prueba de fuego".
Muchos relacionaron su delicada situación personal con su ruptura con Rachel Valdés, la artista internacional con la que, según contó la revista ¡HOLA!, se produjo un "desgaste de la convivencia" tras tres años de relación. Sin embargo el cantante no tardó en hacer público un comunicado para dejar claro que su estado de ánimo nada tenía que ver con ella. "Rachel Valdés es una mujer increíble a la que quiero, admiro y de la que solo puedo decir cosas buenas", añadió entonces.
Ahora, dos meses después de aquella sonada ruptura, Rachel Valdés ha concedido una entrevista a la revista TELVA. Tal y como explica César Suárez, periodista que la ha llevado a cabo, la ex de Alejandro Sanz ha pidió "expresamente" que no hubiese referencia a cuestiones personales en la entrevista. Y así ha sido.
La artista ha hecho mención a su pasado en Cuba, a su infancia y a su trayectoria profesional. También ha permitido que se la conozca más personalmente al contar que, cuando no se siente preparada, puede "ser tímida". "Tengo que preparar bien lo que quiero decir para hacerlo con serenidad. Si tengo que improvisar en público, me entran unos nervios terribles. Pero cuando he tenido que hacerlo ha salido bien. Uno tiene que ser auténtico ante todo. Si te equivocas, pides perdón, te ríes y sigues. Pero yo prefiero estar prevenida de antemano. Dicen que la mejor improvisación es la que se prepara, ¿no?", respondía.
Sobre su ambición, Rachel Valdés admite que en el subconsciente lleva "la inquietud por ir más allá": "Si tengo pasión, no me importa nada más, no me comparo con nadie, me rebelo solo contra mí misma, para superarme. Aplico esa filosofía de seriedad y compromiso a todas las facetas de mi vida. Si estoy convencida de algo, me entrego. Si no, es que no merece la pena".
Durante sus tres años de relación con Alejandro Sanz, los respectivos hijos de los artistas también convivieron juntos. En esta entrevista, Valdés habla de su hijo Max, que tiene nueve años, y de lo difícil que le resulta a veces la maternidad. "Quiero darle lo que yo no tuve, pero a la vez no quiero que lo tenga todo para que sienta la necesidad de buscar y esforzarse. Es un difícil equilibrio hoy en día, donde todo es comparativa. Que si este tiene un iPad por qué yo no, que si el otro tiene tal videojuego... Creo que es más difícil ser madre hoy que hace treinta años", ha reflexionado.