Ya había interpretado algunos papeles en cine y televisión con anterioridad. Pero fue su personaje de Aída García en 'Siete vidas' (y el posterior 'spin off' protagonizado por ella) el que catapultó a Carmen Machi a la fama, convirtiéndola en una de las actrices más conocidas del país. Desde entonces, tras dar vida a la asistenta de hogar durante una década, ha protagonizado un sinfín de series, películas y obras de teatro, acumulando un destacado y premiado currículum. Pero lo cierto es que, pese a ser un rostro muy reconocible, Carmen sigue siendo, en lo que a su vida personal se refiere, una desconocida para el gran público.
La actriz madrileña ha conseguido que el foco mediático no absorba también a su faceta privada. Pese a su destacada exposición, Machi ha logrado blindar su intimidad, y que sean muy pocos los datos que se conocen de ella fuera de los rodajes o las tablas. Eso incluye a su familia, de padres españoles con raíces italianas y cántabras, como ha explicado en alguna ocasión. También su vida sentimental, la que comparte desde hace más de dos décadas con su chico, Vicente.
La relación entre Carmen y él es totalmente desconocida para el público, y se caracteriza por la apuesta decidida por la discreción. Son muy pocos los datos que han trascendido con respecto a su historia de amor con Vicente, músico de profesión. Apenas ha aparecido en photocalls ni eventos con ella: solo lo hizo durante la gala de los Goya en la que la intérprete se llevó el cabezón por 'Ocho apellidos vascos'. Tampoco hemos podido verle mediante otras vías, como ocurre con otros muchos vips, al carecerla madrileña de redes sociales. Sí es cierto que los paparazzi han podido captar a la pareja en alguna ocasión de forma furtiva por la calle.
Ambos hacen vida en común en Madrid, donde viven juntos, en un piso en el céntrico barrio de Malasaña que ella compró con lo ganado en 'Siete vidas'. Disfrutan de planes en la capital, cuando sus respectivos trabajos se lo permiten y, sobre todo, de las escapadas a su querida Zahara de los Atunes. Pero lo cierto es que, pese al tiempo que llevan juntos, Carmen no se plantea dar uno de los tradicionalmente acostumbrados pasos en relaciones sentimentales tan longevas. Así lo ha contado ella misma.
La Machi descarta de plano ideas como una posible boda con Vicente. Tampoco ha barajado nunca tener hijos y formar una familia junto a él. Y hay un motivo concreto por el que rechaza estos planes personales: "Casarme me da miedo, lo mismo que tener un hijo", ha explicado en alguna ocasión, cuando ha sido preguntada al respecto.