La vida de Lolita Flores es conocida por buena parte del público patrio. La mayor de los hijos de Lola Flores ha estado en el candelero desde que nació, fruto del matrimonio entre 'La Faraona' y 'El Pescaílla'. Su larga carrera musical no ha hecho sino mantener vivo el interés mediático en ella, que desde siempre ha excedido de lo meramente profesional para abarcar también la faceta más personal de la vida de la cantante. Acontecimiento como su boda con Guillermo Furiase son ya historia de España. Pero hay otros episodios más desconocidos de su vida: de uno de ellos ha hablado recientemente, como puedes ver en el siguiente vídeo.
La vida sentimental de Lolita ha estado marcada, principalmente, además de algunas especulaciones sin confirmar y de su romance con Francisco Rivera 'Paquirri', por sus dos matrimonios. Flores se casó en 1983 por primera vez con Furiase, padre de sus dos hijos, la actriz Elena Furiase y el más desconocido Guillermo. Tras separarse en 1995, en 2010 volvió a pasar por el altar con Pablo Durán, con quien acabaría rompiendo un lustro después.
La artista ha hablado siempre con naturalidad de sus relaciones, y ahora ha reconocido cómo se enteró de la infidelidad cometida por uno de sus dos maridos, sin revelar en concreto si se trató de Furiase o de Durán. Lo ha hecho en su intervención en 'TardeAR', donde participa como colaboradora. En una charla con respecto a esta cuestión, el programa ha contado con la intervención de un experto con el que se ha profundizado en ciertos dispositivos pensados para "pillar" a los infieles. Ha sido entonces cuando la intérprete de 'Sarandonga' ha reconocido que ella descubrió una deslealtad sin necesidad de ningún aparato.
Lolita ha reconocido que había algo que le "mosqueaba mucho" hace años con respecto a uno de sus dos exmaridos. "Sin ir la 'Tienda del Espía', ya los pillaba yo por mi cuenta", ha bromeado la artista. Todo se producía cuando su pareja volvía del gimnasio. "Traía la ropa demasiado mojada, como si la hubiera metido debajo del grifo", ha relatado la andaluza. "Y yo me decía 'Si ha estado jugando una hora al tenis, tanto no puede sudar", ha comentado, entre las risas de la mesa de tertulia. "Bueno, pues eso", ha concluido, con ironía.