Dicen que en el amor todo vale. No es de extrañar que, en un momento dado y por las circunstancias, dos personas dedicadas al mismo gremio, se enamoren. Este ha sido el caso, precisamente, de dos de los expolíticos con mayor influencia en nuestro país: Irene Montero y Pablo Iglesias. Lo que comenzó siendo una relación meramente profesional entre ellos, se convirtió en una mediática historia de novela. Desde sus comienzos, los que fueran vicepresidentes del Gobierno de Pedro Sánchez, su idilio fue clandestino. Ahora, la exministra de Igualdad ha roto su silencio sobre su relación sentimental con el exlíder de Unidas Podemos.
Montero ha acudido a 'Animales Humanos', el podcast presentado por Ibai Vegan, en donde se ha sincerado sobre su vida sentimental con Iglesias, con el que mantiene una relación "monógama": "La imposición de las relaciones monógamas están llenas de muchos mitos y mandatos que nos hacen sufrir muchísimo. Entiendo que puedas sentir estos vínculos intensos con más de una persona al mismo tiempo. Me resulta absolutamente fácil de entender, pero imposible de ejecutar".
Dejando claro que le resultaría imposible tener una relación abierta con el excandidato de Unidas Podemos, la psicóloga se ha considerado una persona "celosa", aunque no está orgullosa por ello, lo que le impediría tener más relaciones con otras personas que no sean su pareja. "Lo reconozco. Me han educado así y no me veo capaz de exponerme a una relación abierta", además ha dicho que, "lo ve lejos de poder intentarlo", aunque considera que "no sea la posición más saludable".
Desde que ambos dejaran la política, los rumores de ruptura entre ellos han sido casi diarios, hasta tal punto que estas noticias han llegado hasta miembros de su familia, como a la madre de la exministra de Igualdad. En 'Animales Humanos, Montero ha negado que exista ninguna crisis con Iglesias: "Es un ataque tan global que va también a lo personal". Además, ha puesto como ejemplo que, un martes cualquiera, "su madre la ha llamado para saber si estaba con Pablo".
Con estas declaraciones, la exvicepresidenta del Gobierno ha dejado muy claro que su relación sentimental con Iglesias va viento en popa. Sin embargo, en esta entrevista, ha confesado que si en algún momento pasara que tomaran rumbos por separado, seguirían siendo una familia ante todo: "Somos una familia. Pablo es una persona fundamental en mi vida y lo seguirá siendo con independencia de lo que pase en el futuro".