Liam Payne fallecía este miércoles a los 31 años. El exintegrante de ‘One Direction’, que tras la separación de la banda se sinceró en más de una ocasión sobre las etapas más duras a las que había tenido que hacer frente debido a la popularidad que alcanzó, había visto reflejada su relevancia también en los detalles que desde que saltara a la fama han trascendido sobre su lado más íntimo. Es en este plano donde estos últimos días recibía una ola de críticas tras las últimas declaraciones de Maya Henry, con quien mantuvo una relación de cuatro años de duración.
Tras su ruptura con Liam, Maya escribió su primera novela, ‘Looking Forward’, la cual advirtió que estaba inspirada en hechos reales. De hecho, tras su publicación, son muchos los seguidores de ambos que vieron reflejados comportamientos de su historia de amor e incluso ella afirmó que había cambiado nombres y ciudades aunque había muchas “cosas peores que ha dejado fuera”.
De forma posterior, en las entrevistas que ha concedido con motivo de su promoción, la modelo ha profundizado en algunos de los factores descritos a lo largo de sus páginas como el acoso que habría recibido por parte de Payne, algo a lo que hace unos días también hacía referencia en su propia cuenta de TikTok: “Me llaman obsesionada… Cuando ni siquiera saben lo que pasa de puertas para adentro", explicaba sobre la situación que le ha sobrepasado y habría desencadenado el que acusó de "explotar su teléfono" con mensajes desde diferentes números.
En las mismas imágenes, recalcaba que su expareja había hecho “cosas repugnantes” pero era consciente de que podía “escapar de cualquier cosa” porque “sabía” que sus fans “siempre serían leales y no le delatarían”. Sin embargo, después de que vieran la luz los comunicados, el artista recibió numerosas críticas a través de las redes sociales en las que los usuarios, algunos de ellos seguidores de su trayectoria musical, cuestionaban su persona y mostraban su preocupación por su conducta.
Durante su intervención en el podcast Diary of a CEO, Liam hablaba sobre el control al que había estado sometido desde la formación de One Direction, lo que le llevó a "poner presión sobre mucha gente en el pasado": "Me preocupaba lo lejos que iba a estar mi fondo... Y nunca lo habrías visto, soy muy bueno escondiéndolo. Ni siquiera sé si lo golpeé todavía", decía entonces.
En el mismo formato, confesaba el que consideraba uno de sus mayores fracasos tras haber dado por finalizado su último romance: "Estoy más decepcionado de mí mismo por seguir lastimando a la gente. No he sido muy bueno en las relaciones y sé cuál es mi patrón. Siento que solo necesito trabajar en mí mismo antes de ponerme en otra persona. Ahí es donde llegué en mi última relación, no me dieron una muy buena versión de mí que no apreciaba y no me gustaba ser. Necesito arreglarme y no culpo a nadie por ello", sentenció.