Cristina Pedroche habla de los problemas que ha vivido con Dabiz Muñoz: "Yo lo intento cada día"

En la larga lista de las parejas mediáticas del universo vip patrio hay un hueco especial para Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz. La presentadora y el chef mantienen una relación sentimental desde hace una década, y la mayúscula exposición pública de ambos, derivada de sus largas y reconocidas trayectorias profesionales en el mundo de la televisión y la cocina, respectivamente, ha disparado el interés en ellos como pareja. En estos años, en los que ha habido boda y se han convertido en padres de su hija Laia, ha sido ella quien ha hablado con mayor frecuencia y naturalidad de cuestiones personales y sentimentales. Y así lo ha vuelto a hacer recientemente, sincerándose como nunca sobre el carácter de su marido y cómo les afecta como pareja.

Se conocieron de forma casual en un evento de una marca deportiva. Y surgió el flechazo, como ambos han relatado en más de una ocasión posteriormente. Este sería tal que apenas diez meses después, Cristina y Dabiz se darían el 'sí, quiero' en una discreta y originalísima boda celebrada en su piso del madrileño barrio de Vallecas, con los vaqueros puestos. Con el tiempo, los dos dieron pasos adelante en la exposición de su relación, aunque la colaboradora, con una enorme proyección en redes sociales desde hace años, siempre ha ido por delante de él.

Así ha ocurrido esta semana, cuando se ha publicado una nueva entrevista de la madrileña, concedida al locutor y presentador Uri Sabat para su pódcast, 'La fórmula del éxito'. Se trata de una charla extensa, en la que la periodista se ha sincerado en profundidad sobre muchos temas, profesionales y personales, desde el impacto de la fama en su vida a su faceta como madre de Laia, que narró en detalle en su último libro, 'Gracias al miedo'. Y también ha habido hueco para hablar de su vínculo con Dabiz y la personalidad de este.

Cristina Pedroche se sincera sobre la personalidad y el carácter de su marido

Sabat ha preguntado a Pedroche por cómo está su marido. Y la respuesta de Cristina ha sido muy clara. "Está muy bien, dentro de sus obsesiones y de ser una persona insatisfecha de por vida. Porque es una persona infeliz, yo mira que intento cada día demostrarle la cantidad de cosas que tiene para sentirse afortunado y sentirse el puto amo del mundo, pero él aún así, no sé, hay veces que le gusta estar en su tormenta, yo eso lo digo mucho, que es una persona muy tormentosa", ha declarado la presentadora.

Cristina ha destacado el "perfeccionismo hasta el extremo" de su marido que, en sus propias palabras, es una persona que "dice 'si algo está bien, cámbialo, porque puede estar mejor". "Entonces claro eso es una obsesión, porque, joder, siempre puede estar mejor. Y digo yo esto que el libro... ", ha comentado, entre risas, sobre su particular proceso de creación de la mencionada obra, en la que narra sus miedos y temores desde que supo que estaba embarazada por primera vez. "Yo soy muy perfeccionista y muy loquita, pero Dabiz me supera con creces", ha confesado.

Así afecta el carácter de Dabiz Muñoz a su relación con Cristina Pedroche

Pero la colaboradora no se ha limitado a hablar de la personalidad del padre de su hija: también ha aclarado si esto tiene un impacto en su relación y los problemas que genera en la pareja. "Es un poco a medias", ha respondido a la pregunta de Uri sobre si esta característica personal de su marido es algo constructor o destructor para su matrimonio. "Hay veces que no es feliz, solo es feliz cuando termina de correr, cuando está bañando a la niña, cuando estamos comiendo no sé qué o en no sé cuál restaurante. Y eso no mola, molaría que él estuviera muy feliz y muy contento cocinando en DiverXO", ha apuntado. El lema de Dabiz es "vanguardia a morir" y, según su mujer, se lleva "muriendo muchísimos años" por ello.

El impacto del carácter de Dabiz en su faceta como padre de Laia

Esta personalidad tiene también sus sacrificios y su reflejo en la faceta de Muñoz como padre. Para Cristina, el madrileño es un "padrazo". Pero este nivel de "obsesión" genera que no pase el mismo tiempo que ella con la pequeña. "Yo muchas veces se lo digo, estás sacrificando el tiempo de la niña por estar en DiverXO, pero es que es su vida, es su sangre, que mi hija también. Pero es difícil, está conciliando de la mejor manera que sabe y la que la hace, entre comillas, feliz. Como no es feliz nunca, en la que se siente más cómodo", ha concluido.

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