La suya será una de las bodas del año. Y no solo por la identidad vip de los novios, que también. Las circunstancias que rodean el enlace entre Claudia Osborne y José Entrecanales han ido creando unas expectativas que culminarán este sábado 2 de octubre en Jerez de la Frontera, ciudad natal de la coach. El protagonismo de Bertín como padrino, la reaparición social de su hermana Eugenia tras su separación o la unión de dos apellidos clave para la jet set cañí son algunas de las cuestiones sobre las que se ha debatido desde que se filtró su compromiso mucho antes de que lo hiciesen oficial. Y sobre todas ellas ha contestado la protagonista en este vídeo, donde da su opinión sobre la ausencia de Fabiola y desvela cuál ha sido su última conversación. Pero detrás de todo este revoltijo que atañe a cuestiones del papel couché hay una breve pero intensa historia de amor que se remonta un año atrás.
Esta fecha coincide con el boom de la tercera y última hija que el presentador tuvo con la desaparecida Sandra Domecq. En 'Lo mejor de ti', su primer libro, esta joven de 32 años hizo una catársis editorial con la que nos contó cómo logró salir de una etapa de toxicidad. En la adolescencia, una fuerte "sensación de abandono" y varias relaciones fallidas derivaron en dos depresiones y un trastorno de alimentación de los que logró salir a base de terapia. Y de esto, de ese clic, de aprender a cuidarse de una misma, habló largo y tendido en esta etapa de fuerte presencia mediática.
Por entonces, era tal la importancia de su discurso que su vida sentimental pasó desapercibida. Pero una vez se escuchó su historia, poco tardaron los quioscos en mostrarnos esa rendija personal de la que durante un tiempo fue la hija más desconocida de Bertín.
Tras años huyendo de la prensa, José Entrecanales se convertía en el primer gran amor de Claudia que trascendía. Era ¡Hola!, la revista de cabecera del clan Osborne, quien ofrecía sus primeras imágenes juntos (y confirmaba su noviazgo). Y a partir de ahí pudimos conocer en profundidad al nuevo yerno del cantante.
Miembro de una de las familias más poderosas de España, su nombre puede que te suene por ser el hijo de José Manuel Entrecanales Domecq, actual Presidente Ejecutivo de Acciona. De él heredó la vocación empresarial, para la que se formó en el Eton College (el elitista colegio inglés en el que estudiaron los príncipes Harry y Guillermo) y en la Universidad Pontificia de Comillas, donde cursó Derecho y Administración de Empresas.
De ahí pasó a hacer una beca en ED&F Man, a trabajar dos años para la banca de inversión Goldman Sachs y a estudiar un MBA en la Harvard Business School. Una amplísima formación que le hizo fichar en 2018 como asociado senior de Energía y Renovables en la sede de Toronto de CPP Investment Board.
A pesar de no haber superado la treintena, José Entrecanales ya contaba con todos estos méritos profesionales cuando conoció a Claudia Osborne. En él, la escritora de 'Lo mejor de ti' también encontró a un gran aficionado al deporte, pasión que comparte con sus hermanos Gonzalo, Clotilde y Gerardo. El esquí, las motos, el ciclismo o los viajes a Santander y Sotogrande, donde ha pasado sus mejores veranos, también son parte del curriculum vital del empresario. Pero hay algo más que le une: el apellido Domecq.
Como todo buen 'lazos de sangre' que se precie, el abuelo materno de Claudia, Beltrán Domecq y González, padre de la difunta Sandra, que falleció en 2004, era hermano del bisabuelo de José, Pedro Domecq y González. Una casualidad ancestral que hace que esta unión de clanes cobre aún más relevancia.
Sin embargo, esta pequeña anécdota no fue lo que hizo que Entrecanales se ganase a su nueva familia política. Desde que se confirmó su relación (y posteriormente su boda), tanto las tres hermanas de Claudia, con las que acaba de celebrar su despedida de soltera, y le han dado las gracias públicamente por hacer tan feliz a la joven cada vez que la prensa les ha preguntado al respecto.
Ahora, una vez superado el primer shock que da ser titular, los novios han aprendido a gestionar el interés mediático que genera su relación. De su silencio absoluto cada vez que les paraban por la calle, cada vez han sido más las muestras de complicidad que han nutrido las portadas a lo largo de los últimos meses. También las declaraciones de amor públicas, aunque nulas en redes sociales, sí destacables cuando hay una cámara delante.
Es más, ha sido este fin de semana, durante una firma en la Feria del Libro de Madrid, cuando Claudia Osborne se ha manifestado con espontaneidad sobre esta inminente boda que afronta con pocos nervios, mucha ilusión, el recuerdo de su madre presente, las ganas de ver a su padre ejercer de padrino y la pena por no poder compartir un día tan especial con Fabiola, por la que guarda un enorme afecto a pesar de las circunstancias.