El pasado mes de agosto se hacía pública la noticia. Tras siete años de relación, Lujan Argüelles rompía con Carlos Arenas, padre de su única hijaCarlos Arenas, padre de su única hija. Tras el confinamiento sus caminos se separaron y tiempo después ponían fin a su historia de amor. Aunque siempre ha querido llevar su vida privada con la máxima discreción, la presentadora ha concedido una nueva entrevista a la revista ‘Semana’ en la que cuenta cómo han sido estos últimos meses y cómo afrontó, de cara a la galería, un momento complicado de su vida.
“Creo que soy muy emocional, muy pasional, muy de verdad, y eso hace que cada día viva las cosas de una menta muy diferente y eso puede parecer muy incongruente”, explica la presentadora sobre los motivos por los que siempre ha intentado mantener su vida privada en un segundo plano. Poco después de que tomasen la decisión de separarse, la revista ¡Hola! acaba esta noticia a la luz y Luján tiene claro que no tiene “tiempo ni lugar” para hacer entender las cosas a los demás. Una de las cosas que han copado el protagonismo de su vida en estos meses ha sido su hija Miranda, por la que no puede “deprimirse o decaer”. “Los niños requieren mucho de ti y tienes que tener mucha energía, estar siempre jugando y haciendo de todo para que esté entretenida”, asegura.
“Pues igual, siendo más actriz que Penélope Cruz…”, así es cómo ha tenido que actuar la presentadora en los últimos meses para poner una buena cara ante el público cuando no estaba atravesando un buen momento personal. Fue durante el confinamiento cuando sus caminos se separaron y, aunque no ha querido desvelar los motivos que les llevaron a tomar al decisión, Luján asegura que “vas previniendo lo que va a pasar en tu vida”.
Su hija es su auténtica prioridad, pero también su amistad, esa que construyeron antes de comenzar su relación. “Todo en la vida tiene sus más y sus menos. En este caso, la única cosa clara es que nosotros nos conocíamos desde hace muchos años. Con lo cual, la amistad no desaparece de la noche a la mañana. Y, por otro lado, hay otra cosa que es evidente, nosotros tenemos un tesoro, que tiene cinco años y somos conscientes de ello”, afirma. Su hija, que se llama Miranda, es para ellos “la persona donde confluyeron sus dos energías” y eso va a ser siempre así. “Somos dos energía que vamos a tener que caminar juntas”, asegura.