Si no hay tercero en discordia, no hay novela. En toda buena historia de amor que se precie siempre tiene que existir ese personaje despechado, enamorado hasta las trancas y sí, normalmente despreciable y antipático. En las series de Divinity lo sabemos bien.
Desde que 'Kara Sevda' aterrizara en nuestras vidas hemos sido testigos de como esos personajes hacían la vida imposible a los protagonistas de cada una de las series. Emir fue el primero (y sí, quizás el peor de todos) pero no ha sido el único. La lista es larga. Polen y Yigit, Mete, Deniz, Demet, Didem... Los hay para todos los gustos. Unos son malos y otros peores, algunos nos hacían gracia y otros se ganaron a pulso convertirse en los personajes más odiado de la serie. ¿Los recuerdas a todos?
Sí, estaba enamorado. Y mucho. Emir adoraba a Nihan desde niño, soñaba con casarse con ella y formar una familia. Sin embargo, las cosas no salieron como él esperaba. Emir se volvió loco al ver como la mujer de su vida le ignoraba y le hacía el vacío una y otra vez y en esa locura perdió el rumbo y se convirtió en un hombre muy peligroso.
Los límites dejaron de existir y entró en un 'todo vale' que le llevó a conseguir su objetivo por las malas. Tendió una trampa a la familia y obligó a Nihan a casarse con él. Ahí comenzó el infierno para los dos. Sí. Ambos se vieron atrapados en un matrimonio que, por motivos diferentes, hacía cada día más infeliz a los dos. Si a esa ecuación unimos a Kemal, la bomba de relojería está a punto de estallar.
Y de Emir pasamos a Polen. Sí, no era tan mala como Emir (igualarle es prácticamente imposible) pero tampoco caía bien. Inteligente, guapa, con pinta de modelo, buena cocinera, simpática, encantadora... Polen lo tenía todo menos una cosa. No era Sanem. Ella lo sabía y consciente de que no podía hacer nada para recuperar a Can se dedicó toda la primera temporada a sacar de sus casillas a la protagonista de 'Erkenci kus'.
Y de casta le debe venir al galgo porque si no teníamos bastante con Polen llegó Yigit, su hermano. Y esta vez, al que le tocó sufrir fue a Can. El editor se enamoró perdidamente de Sanem y trató por todos los medios conquistarla. Al ver que no lo conseguía, salió a relucir (ayudado por Hüma) su lado más oscuro. Acusó a Can de quemar el libro de su novia y fingió una lesión medular para darle lástima y conseguir acercase a ella. Por lo menos, Emir iba de cara.
Polen y Yigit no son los únicos hermanos que han dado guerra en Divinity. Deniz y Demet hicieron de las suyas en 'Dolunay' y trajeron de cabeza a los protagonistas. El primero fue Deniz, que de amigo (casi hermano) de Ferit se convirtió en su peor enemigo y llegó a traicionarle por culpa de los celos. Su amor por Nazli le trastornó. Eso unido a la previsión de los malvados Hakan y Demet hicieron que se convirtiera en una marioneta por despecho al no ser correspondido.
Por su parte, su hermana Demet se convirtió en una de las grandes villanas (aunque al final no dio un poco de pena) de esta historia. Enamorada de Ferit desde hace años no pudo superar su ruptura con él y cuando Nazli apareció en escena enloqueció. Hizo la vida imposible a la pareja y no dudó en intentar matar a la cocinera para evitar la boda de su ex. ¡Qué carácter!
¡Y qué decir de Mete! Mira que empezó cayéndonos bien. Mete era el típico buen tío en el que todos confiaban. Trabajador, leal, buen amigo... Pero no estaba enamorado de Öykü. Él no tenía la culpa de eso. Sin embargo, cuando Ayaz apareció en escena y la chica que siempre había estado comiendo de su mano se enamoró de él, el buen hombre mutó y se transformó en un villano de libro. A partir de ese día, empezaron las conspiraciones, las trampas, las puñaladas por la espalda... Mete se ganó a pulso convertirse (sí, junto a Önem) en el personaje más odiado de 'Amar es primavera'.
En 'Hayat' tampoco nos libramos de la tercera en discordia. Y sí, como en todas las historias de amor, era mala. Pero no tanto. Didem, era con diferencia, la mala más tonta y torpe de todas las que hemos visto y tenía un punto que nos hacía hasta gracia. Eso sí, como todos las lió pardísimas e hizo la vida imposible a Burak. ¡Hasta le hizo creer que estaba embrazada!
Estuvo a punto de conseguirlo. Pelinsu era la novia perfecta para Onur. Guapa y de buena familia (aunque estaban en la ruina), educada e inteligente, cumplía con todos los requisitos para ser la mujer que los padres de Onur necesitaban para hacerse con la herencia. Sin embargo, Lale se cruzó en su camino y dio al traste con todos sus sueño. Y fue en ese momento cuando descubrimos que esa joven tan dulce escondía a una mujer ambiciosa y malvada. Muy malvada. Lleva meses haciendo la vida imposible a la pareja y ha intentado por todos los medios (aunque sin éxito) recuperar al empresario.
Los últimos en unirse a esta lista de terceros en discordia han sido Alara y Burak en 'En todas partes, tú'. Y ya prometen darnos mucha guerra. Ella se ha enamorado de Demir nada más conocerle y le ha declarado la guerra a Selin. Mientras, el hijo del dueño de Artemin cree que la interiorista está enamorada de él (quizá en algún momento lo estuvo pero justo ahora no) y ha decidido entrar en guerra con Demir. Está claro que estos chicos prometen dar muchos quebraderos de cabeza a los protagonistas. ¡Veremos cómo acaba todo esto !