Joaquín Torres sufrió hace unos días un accidente de moto que le ha obligado a permanecer ingresado en el hospital desde entonces. El arquitecto entraba durante el día de ayer en quirófano para someterse a una operación y horas después, ha sido él mismo el que ha querido tranquilizar a sus seguidores en las redes sociales.
Desde la cama de la habitación del hospital, Joaquín ha publicado hoy un vídeo en el que dedica unas palabras de agradecimiento a los que han mostrado preocupación estos días por su estado tras el grave accidente: "Me he decidido a hacer este vídeo porque estoy abrumado por la cantidad de mensajes de cariño y apoyo tras mi accidente. He de deciros que llevo ya nueve días aquí, me operaron ayer. La operación fue de ocho horas. Fue muy compleja pero estoy bien".
También ha querido dirigirse hacia el personal del hospital que ha estado y continúa pendiente de su evolución: “Agradecer desde aquí, desde lo más profundo de mi corazón, a la sanidad pública. Me emociona muchísimo hablar de esto porque he comprobado lo injusta que somos la población con este sector. Todo el personal ha sido absolutamente extraordinario. Deciros que gracias, gracias de verdad. Vuestro apoyo y vuestros mensajes me han servido muchísimo. No os contesto por razones evidentes".
Aun cansado tras la intervención y con una vía en un brazo y con el otro escayolado, ha querido acompañar también el vídeo con un mensaje escrito: “Queridos amigos, este vídeo sencillamente para agradeceros vuestro ánimo y cariño. Vuestros miles y miles de mensajes que os leo y que me emocionan. Espero estéis todos bien y os mando un beso a todos”.
El suceso ocurrió el pasado 4 de diciembre aunque no trascendió a los medios hasta tres días después. Tuvo lugar en el momento en el que Torres montaba en su moto para acudir al trabajo y era arrollado por un coche que salía de un garaje cercano.
Las consecuencias del golpe fueron numerosas lesiones que concluyeron con el diagnóstico de un antebrazo facturado, la pelvis rota por varios lugares y una lesión de hígado y pulmón. El marido de Raúl Prieto aprovechó entonces para denunciar los peligros a los que se enfrentan los motoristas y confesaba que el accidente había sido "muy muy farragoso" y que podía "haber ido a mayores". Desde entonces, ha permanecido ingresado a la espera de una intervención quirúrgica que finalizaba hace unas horas.