{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Los que fueron adolescentes a finales de los años 90 y principios de 2000 recordarán el enorme éxito que alcanzaron entonces las Destiny's Child. El grupo de r&b femenino estadounidense fue un auténtico fenómeno de masas entonces, siendo la plataforma gracias a la que el público tuvo su primer contacto con Beyoncé, líder de la formación. Junto a ella, en las distintas etapas y composiciones que tuvo el grupo, estuvo Kelly Rowland. La artista, con una larga trayectoria en el mundo de la música y la interpretación, ha sido una de las protagonistas de la última jornada del Festival de Cannes debido al altercado que se ha generado entre ella y el equipo de seguridad a su paso por la alfombra roja.
El certamen cinematográfico vuelve a acoger un año más, como ocurre anualmente cada mes de mayo, a lo más granado del séptimo arte. Profesionales del séptimo arte europeo e internacional se dan cita en la Costa Azul francesa en el que es el festival de cine más destacado de la temporada, que propulsa a buena parte de las películas que concentrarán la conversación durante la posterior temporada de premios. A todos ellos se suman habitualmente otros muchos asistentes, entre nombres de la moda, la música o, en general, del mundo vip.
Entre ellos se encuentra Rowland. Aunque la artista tiene una larga carrera en la pequeña y la gran pantalla, en esta ocasión ha acudido a Cannes simplemente como invitada. Ayer se dejó ver durante el desfile de celebrities previo al pase del filme francés 'Marcello Mio', en honor al mítico intérprete italiano Marcello Mastroianni, en la que intervienen la mujer y la hija del actor. Durante la mencionada alfombra roja, la excomponente de las Destiny's Child, cantante de éxitos como 'Dilemma' o 'When Loves Takes Over', acudió con un impresionante vestido rojo, con escote de palabra de honor y una pequeña cola.
Durante el paseo anterior a acceder a la proyección del largometraje, Kelly se vio envuelta en un altercado verbal con el equipo de seguridad del festival, que pudieron captar los reporteros gráficos desplazados a la Riviera francesa. En las fotografías, se puede ver a Rowland visiblemente alterada y molesta con un miembro del personal que la conducía al interior del lugar, levantando un dedo para dirigirse a la persona de seguridad, que le respondió, y a la que se giró para contestar mientras seguía subiendo las escaleras.
El medio británico Daily Mail ha podido obtener más información con respecto de lo sucedido en este altercado, más allá de las imágenes. Al parecer, el enfrentamiento se habría producido porque los miembros de seguridad del evento se mostraban "agresivos" en la organización del acceso a la premier. Según explica el medio, aunque Kelly intentó ignorarlas, acabó "harta" ya que una de las mujeres del personal regañó a la artista y "le dijo que se moviera cuando intentaba saludar a los fans y ayudar a los paparazzi a que tomaran sus fotos". Las fuentes del tabloide inglés señalan que Rowland quería "establecer un límite claro" y no le importó "parecer una diva" porque simplemente se estaba "defendiendo".