María Castro daba la bienvenida a su hija Emma el pasado mes de abril, quien se ha convertido en su tercera niña junto a su marido José Manuel Villalba, con quien pasó por el altar en 2018. Es junto a todos ellos con quienes comparte, a través de sus redes sociales, numerosos momentos con los que hace partícipes a sus seguidores de su vida familiar. También en su perfil acostumbra a subir las rutinas de ejercicio que retomaba en junio, dos meses después de ser madre, y que ahora han supuesto un motivo de crítica al que ella no ha tardado en reaccionar.
Hace escasas horas, María publicaba en su cuenta de Instagram unas imágenes capturadas desde su domicilio y en las que aparecía haciendo hipopresivos, el método que combina la respiración con la contracción de los músculos abdominales. “Cumplo la rutina porque así me encuentro fuerte, ágil y con la barriga más presente… Es como si durante el embarazo, relajase mi tono muscular para que el bebé hiciera de mi barriga, su casita a sus anchas… Pero luego eso hay q recuperarlo… por salud y porque además es el eje del cuerpo”, describía sobre el motivo por el que ha adoptado la señalada disciplina deportiva.
Aunque en el mismo texto afirmaba dar la “bienvenida” a las “secuelas que se queden porque formarán parte de los tres recuerdos más importantes de mi vida”, son algunos los usuarios que, frente a los que alaban su fuerza de voluntad, han juzgado su aspecto físico. Como consecuencia, la actriz ha querido responder a las críticas a través de sus historias temporales: “Estoy un poco impresionada y en parte decepcionada con los comentarios que he recibido en el vídeo de ayer haciendo hipopresivos en casa”, ha comenzado sentenciando.
Castro ha afirmado que hace ese tipo de vídeos porque orientan a las mujeres que acaban de dar a luz y porque motivan a “en lugar de quedarse en la cama remoloneando, hacerlos”, en su caso siendo madre de tres hijas y consiguiendo “sacar el hueco”: “Esto es lo que le genera a la mayor parte de la gente pero hay un grupo de personas que se dedican a juzgar mi aspecto físico, que si estoy demasiado delgada, que si vaya cuerpo escombro, que si soy demasiado recta…”, ha resumido sobre los juicios recibidos.
Aunque la intérprete reconoce que no le afectan “este tipo de cosas”, sí que piensa que pueden convertirse en un peligro para una gran parte de la sociedad: “Pienso cuánto daño pueden hacer a gente que se sienta más vulnerable después de un embarazo, en lugar de valorar la importancia del cuerpo de una mujer y lo que ha trabajado para tener tres hijos”, ha continuado.
Además, ha querido añadir una sincera reflexión: “Creo que hay mucho que trabajar en esto todavía, qué poco bien nos hacemos. Cuando vas a decir algo que a los demás no les aporta nada y no es positivo para nadie, ¿para qué lo dices? Piénsalo si quieres pero, ¿por qué lo pones en redes sociales? ¿Porque te sientes amparado? ¿Me lo dirías en la calle? ¿Te sientes mejor diciéndolo? Lo dudo. El odio genera odio”, ha concluido.
Del mismo modo, ha querido dejar claro que va a continuar subiendo el mismo tipo de contenido “tan feliz”, viendo cómo su cuerpo “se recupera día a día”.