Hace ya más de un mes desde que Ion Aramendi y María Amores ampliaron su familia con la llegada de la pequeña Marieta. El bebé, la primera niña del matrimonio tras los nacimientos de Ion y Lucas, llegó tras un complicado parto, y ya se ha convertido en la protagonista de las redes sociales de sus progenitores. La periodista ha relatado recientemente cómo están siendo estas semanas de posparto. "Como no le doy el pecho me creo que estoy saliendo del bache y no, he sacado a un ser humano de mis entrañas", reconocía hace poco. Amores quiere intentar volver a la normalidad, y para ello ha comenzado a hacer una dieta de cara a recuperar su forma física, la denominada dieta del bocadillo, ¿en qué consiste?
María ha comenzado por narrar en Instagram cuál es su situación física actual. Durante el embarazo, como ella misma confesó, llegó a ganar diecisiete kilos. Aunque lógicamente el número ha bajado ya, la periodista no se siente demasiado a gusto con su actual forma física. "Los kilos, más la barriga, más tal… Yo no estoy cómoda, no me puedo poner nada de mi ropa. Parezco don Pimpón, yo que estoy acostumbrada a otro tipo de cuerpo", ha comentado en stories, dejando claro que respeta cada tipo de cuerpo y que ha tomado esta decisión al no estar dando el pecho a Marieta. "Realmente no estoy ni siquiera gordita, estoy amorfita", ha puntualizado.
Tras consultar con algunas amistades, ha decidido acudir a una nutricionista, que le ha asesorado y le ha realizado un plan nutricional totalmente detallado y personalizado. María seguirá la popularmente conocida como dieta del bocadillo. Y ha explicado en stories en qué consiste. Este régimen limita por completo la ingesta de grasas y permite el consumo de hidratos, algo que interesaba especialmente a Amores: “Lo que más odiaba del mundo era que me quitaran el pan, porque soy panera total”, ha explicado.
Totalmente adaptada a sus necesidades (con un extra de calcio y de hierro, en su caso), a sus gustos, a lo que sabe cocinar y a qué supermercados tiene cerca de casa. María sabe ya lo que tiene que comer cada día: sin grasas, con hidratos de vez en cuando (de ahí el nombre de bocadillo), y una serie de alimentos libres (de los que puede consumir las cantidades que quiera, como algunas verduras y frutas). La periodista puede "saltarse" la dieta algún día puntualmente, y puede consumir, de forma ocasional, alguna copa de vino.
Las cenas son uno de los puntos clave de este régimen: consisten en cenar un bocadillo, pero sin grasas. Puede ser con proteínas, pero se descarta que el contenido del pan incluya grasas. María ha mostrado a cámara, por ejemplo, un aceite de oliva hipocalórico con el que podrá condimentar algunos de sus platos a partir de ahora, para potenciar su dieta de adelgazamiento. Y ha dejado claro que cada persona tiene unas necesidades concretas y que siempre ha de consultar a un especialista antes de hacer cambios importantes en su alimentación.