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Un vídeo que muestra la evolución de Javier Bardem a lo largo de los años ha revolucionado por completo las redes sociales haciéndose viral en X (antiguo Twitter), y es que nos deja ver lo mucho que ha cambiado físicamente el actor desde que tenía apenas 23 años en 1993 hasta la actualidad. Así, hemos podido observar con detenimiento muchos de los looks que Bardem ha lucido con el paso del tiempo, desde el pelo corto, a melena y barba, lo que le aportaba mucha más madurez a su aspecto. E incluso su evidente delgadez tras dar el salto a la fama, junto con una espectacular melena con flequillo y perilla en uno de sus míticos papeles en 'Perdita Durango' en 1997.
A partir de 2001, lo cierto es que el marido de Penélope Cruz ha mantenido su esencia a lo largo de varios años, sin barba y con una media melena (más o menos corta) y flequillo ladeado. Hasta 2006, cuando volvía a sorprendernos con un drástico cambio de look para meterse en la piel de Lorenzo Casamares, miembro de la Inquisición en 'Los Fantasmas de Goya' donde compartía cartel con Natalie Portman. Así, le veíamos con una melena mucho más larga y rizada, ataviado con sotana y nuevamente con un marcado flequillo en forma de cortinilla.
En 2007, Bardem decidía dar un vuelco completo a su apariencia y optaba por un corte más bien clásico y que nos lleva directos hasta los años 80. De hecho, con 'No es país para viejos' nos regaló una de las interpretaciones más aclamadas de su carrera en el cine, nominada nada menos que a ocho premios Oscar (de los que ganó cuatro) incluyendo Mejor película y Mejor actor de reparto. Es más, ahí el marido de Penélope Cruz conseguía hacer historia al convertirse en el primer español en ganar un Oscar. Una ocasión en la que el propio Bardem se pronunciaba sobre su corte de pelo, al que calificaba como "el más horrible de la historia".
"Gracias a los hermanos Coen por estar lo suficientemente locos como para pensar que podía hacerlo y por poner en mi cabeza uno de los más horribles cortes de pelo de la historia", bromeaba al recibir el aclamado premio durante la 80.ª ceremonia de entrega de los Oscar.
Un año después, en 2008, Javier Bardem se resarcía y decantaba por un corte de lo más moderno y favorecedor, que se encargó de matizar con un acabado en punta y que aportaba mucho estilo en 2010. En 2011, el actor volvía a dejar crecer el pelo y nuevamente se atrevía a lucir flequillo, lo que ha mantenido hasta 2017. Ahí, decidía aportarle un aire más varonil y maduro peinándolo de lado, resaltando así el volumen de su flequillo.
Finalmente, en 2018 y a punto de cumplir los 50 años, Javier volvía a aposar por un corte rejuvenecedor, volviendo al toque clásico estos últimos años y manteniéndolo hasta la actualidad. De ese modo, queda claro que al actor le encanta jugar con su estilo, ya sea obligado por sus papeles en el cine, o para lucirlo a diario.
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