Crear hábitos que deseamos introducir en nuestro día a día es uno de los grandes objetivos de muchas personas. Seguro que tú ya lo has intentado y has comprobado con qué facilidad los buenos propósitos se van por donde vinieron. La sensanción de que las horas del día pasan volando y no hay tiempo para introducir hábitos ni cumplir con los que nos hemos marcado es muy común. Por eso queremos hablarte de una herramienta que puede ayudarte a conseguir lo que te propones de una ves por todas, el habit tracker. Te contamos todo acerca de esta herramienta tan útil que puede ser la clave definitiva para que puedas cumplir con todo aquello que te propongas hacer.
Se trata de una idea sencilla que puede ayudarte a conseguir grandes logros. Básicamente es una plantilla de papel que puedes personalizar como tú quieras y registrar en ella aquellos hábitos que quieres llevar a cabo en tu vida, ya sea de manera diaria, semanal o mensual. Se supone que lo que más cuesta introducir es un hábito diario, así que tomémoslo como ejemplo.
Imagina que entre tus propósitos está hacer algo de ejercicio diario y leer, pero nunca lo consigues, o no con la constancia con la que te gustaría. Podrías iniciar un habit tracker marcando solo estas dos actividades, en una especie de horario-calendario. Sitúalas en la franja del día en la que te gustaría llevarlas a cabo y marca cada vez que consigas cumplir tu propósito, de manera que quede registrado. Al mismo tiempo, puedes marcar qué has hecho el resto del día, desde ir a hacer la compra, hasta trabajar o echar la siesta. Ahora la pregunta sería, ¿para qué sirve que haga esto?.
Hacer un seguimiento diario de nuestro hábitos es una forma eficaz de tener un registro que nos permita analizar cómo repartimos el tiempo del que disponemos en nuestro día a día. Seguramente descubramos patrones de comportamiento que puede interesarnos mantener o, por el contrario, cambiar para lograr cosas diferentes. Lo más probable es que si te animas a crear tu propio habit tracker es porque estás buscando precisamente esto último, un cambio.
No se trata de que añadas una presión más a tu vida, al contrario. La idea es que el registro y la observación de tus hábitos te permita actuar de manera consciente en ellos, y alejarte de la ansiedad que te produce no llegar a todo y no saber porqué.
Sabemos que los hábitos no se crean de un día para otro. De hecho, te sonará aquello de que son necesarios 21 días de constancia para conseguirlo. Si apuntas tus progresos en tu habit tracker, podrás animarte a continuar con lo que has empezado, o buscar la forma de lograrlo si ves que no lo consigues. A lo mejor te planteas hacer ejercicio por la tarde, pero descubres que tienes un espacio de tiempo al mediodía que te viene muchísimo mejor. Piensa que no tienes que rendirle cuentas a nadie, solo a ti misma, y que se trata de una ayuda única y exclusivamente para ti.
En el fondo, hacer un habit tracker ya es introducir un nuevo hábito en tu rutina diaria. Por lo tanto serás tú la que tenga que decidir si es la herramienta que necesitabas o, por el contrario, te supone más una carga que una ayuda.
No todos somos iguales, ni respondemos de la misma manera ante las mismas cosas. De hecho, hay gente tan constante y voluntariosa que es capaz de adquirir los hábitos que se propone sin un esfuerzo aparente. Si tú eres, en cambio, de las que necesita un poco de orden y un pequeño empujón, seguir un habit tracker puede serte de gran ayuda.
Eso sí, no te marques objetivos imposibles que sepas de antemano que no vas a poder cumplir, porque el habit tracker no hace milagros. Piensa en cosas realistas y deja a un lado las excusas. Si ves que utilizarlo se convierte más en una obsesión que en una ayuda, y llegas a sentirte frustrada o agobiada cuando ves que no cumples con los objetivos marcados, seguramente esta herramienta no es lo que necesitas.
Se trata de una herramienta 100% personal enfocada a conseguir mejorar tus hábitos, por lo que solo tú puedes saber qué necesitas incluir en él. Piensa cuáles son tus objetivos y prioridades y ponlos en una lista. Revísalos y confirma que todos, sean del tipo que sean, se encaminan a que alcances tu bienestar, de una manera o de otra. Luego decide por dónde quieres empezar y piensa que si introduces muchos hábitos nuevos al mismo tiempo lo más posible es que no logres ninguno.
Hay aplicaciones para que te descargues tu habit tracker, pero también puedes comprarlos en papel o hacer tú el tuyo propio. En él puedes incluir propósitos personales como leer, pasar tiempo con amigos, meditar o hacer deporte. También tienen cabida hábitos alimentarios como comer fruta y verdura, beber el agua suficiente o controlar el consumo de alcohol. Objetivos como hacerla compra, regar las plantas o revisar los gastos de la semana son otros de los que podrían venirte bien. Es tu habit tracker y tú decides lo que pones en él.