La boda del año ya está aquí. Este sábado 9 de julio, Tamara Falcó e Íñigo Onieva se darán el 'sí, quiero' en el palacio de El Rincón. Se trata del enlace vip más esperado de la temporada: a la expectación por el hecho de que la hija de Isabel Preysler pase por el altar hay que sumar las circunstancias particulares del romance, con la ya antológica ruptura y la posterior reconciliación. Y el hecho de tener encima el foco mediático durante todos estos meses ha provocado que asistamos, casi en directo, a una infinita sucesión de polémicas y subtramas. Una de ellas, la que tiene que ver con Eugenia Martínez de Irujo.
Prácticamente todos los detalles que rodean la boda de la marquesa de Griñón y el empresario han dado que hablar. Desde lo sucedido con el vestido de Tamara (y el drástico cambio de diseñador a última hora), a la verdad tras la codiciada lista de invitados, incluida, recientemente, una trama que ya adquiere verdaderamente tintes de película: el robo de joyas por valor de dos millones de euros pertenecientes a algunos de los asistentes al evento. De hecho, no han sido pocos los que, con humor, han interpretado estos infortunios como una señal hacia Tamara para que reconsidere su decisión de casarse.
Pero la boda, pese a la larga enumeración de obstáculos e imprevistos, sigue en pie. Y una de las personas que acudirán a la ceremonia religiosa y la posterior celebración en el palacio que Carlos Falcó legó a su hija es Eugenia Martínez de Irujo. Su asistencia no tendría, a priori, que parecer algo extraño, habida cuenta la relación que hay entre ambas. Pero lo es teniendo en cuenta las declaraciones recientes de la hija de la Duquesa de Alba.
"No voy a ir, vamos, no creo. Tamara es más joven que yo y tampoco somos amigas. Nunca hemos salido juntas entonces no tiene porqué invitarme, la verdad", explicó hace unos días, extrañada por las preguntas de la prensa al respecto. De hecho, a la tercera ocasión que recibió una duda sobre la boda de la marquesa de Griñón, reaccionó de forma inesperada: "No me vayáis a preguntar por Tamara ahora que me la bufa, o sea, no sé cómo explicarte", soltó a los reporteros.
Días después, Eugenia ha querido aclarar sus inesperadas declaraciones, contextualizando que estaba en un tema de la Fundación Querer, algo que, ha dicho, no se toma a broma. "Ya os faltaba preguntarme por la Pantoja, por poner un tema de humor. A la quinta es cuando salté, no por Tamara sino por vosotros, estábamos en un tema importante", ha apuntado. Lo cierto es que, consciente del eco de sus palabras, decidió llamar a Falcó para explicarle la situación y ponerla en antecedentes.
"Soy muy impulsiva y dije 'me la bufa', pero no por ella. No tengo nada en contra de Tamara, es más, la llamé, se lo expliqué porque ya sabía lo que iba a pasar. Nos morimos de risa y ahí se acabó todo", ha explicado ahora Martínez de Irujo, que ha revelado además que sí acudirá a la boda y que ya tiene look para la ocasión.