Su relación actual no es muy fluida, de hecho cuando se supo que su hija Zayra estaba embarazada, la propia Arantxa de Benito confirmó que no tenía comunicación con Guti. Con el bebé las cosas no han sido diferentes, ambos se mostraban encantados y orgullosos, pero seguían manteniendo las distancias.
Siempre estarán unidos, tienen dos hijos que hacen que esa conexión sea eterna, pero ya no queda nada de aquella pareja que se convirtió en estrella de las revistas del corazón, que levantaba pasiones allí por donde iba y que protagonizó una de las bodas del año.
Arantxa de Benito era la mujer que le robaba el corazón al centrocampista del Real Madrid y juntos protagonizaban una relación llena de altibajos en la que los rumores de crisis comenzaron poco tiempo después de su enlace. De hecho, hasta que firmaron la separación, fueron varias las rupturas y reconciliaciones que protagonizaron.
La pareja se daba el ‘sí, quiero’ en el verano de 1999. La iglesia de Los Jerónimos se llenaba de curiosos que no querían perderse esta gran boda, pero también de prensa y fotógrafos, ávidos de conseguir la primera fotografía de ellos ya casados, los detalles del vestido y los rostros de los ilustres invitados.
Un día que la propia Arantxa de Benito recordaba hace unos años como uno de los más bonitos que había vivido. “No fue una boda, fue un ‘bodón’. Lo viví como todas las novias, salvo que la mía fue por todo lo alto”, explicó para ‘Última Hora’. “Nunca imaginé que esa boda iba a generar tanta expectación, ni Guti, ni nadie”.
“Mi entrada en la iglesia, con mi ramo de lirios y ese vestido maravilloso, la recuerdo como un momento de muchos nervios porque no podía ni pasar. Era el día más caluroso del verano, se rompió el coche que tenía que llevarnos a la iglesia y aun así lo recuerdo como un día muy bonito”.
El novio llegó del brazo de su madre, Carmen Hernández, con un chaqué oscuro sobre unos pantalones grises. La novia, radiante de blanco y con su tradicional melena suelta, lució un vestido muy sencillo, de líneas limpias y escote barco, con detalles en las mangas y un discreto velo.
Entre los invitados no faltaron los compañeros de equipo de José María Gutiérrez, nombre completo de Guti, Raúl González y su mujer, Mamen Sanz, Fernando Sanz y su mujer o el portero Pedro Contreras y su esposa.
La pareja se casó muy enamorada, pero los problemas comenzaron poco después, de hecho, el primer comunicado en el que confirmaban su separación llegó en 2003, pero más tarde decidieron darle una nueva oportunidad a su relación.
“Todos los momentos no son buenos para todo el mundo. Hay días en que no tienes buena conexión y ya está”, llegó a decir Arantxa sobre la situación. En el año 2009, diez años después, confirmaban la separación definitiva.