Elsa Pataky ya era una estrella en España cuando decidió dar el salto y probar suerte al otro lado del charco, poco podía imaginarse que esta decisión marcaría un punto de inflexión en su vida y le ayudaría a conocer al gran amor de su vida, el también actor Chris Hemsworth.
La pareja ha hablado en varias ocasiones de cómo se conocieron, cómo fue a través de su profesora de dicción que sus caminos se cruzaron. Ambos trataban de mejorar su acento (Chris es australiano) para aumentar sus posibilidades de conseguir nuevos trabajos y su profesora pensó que podrían llevarse bien.
Su intuición fue todo un éxito, porque a pesar de que Elsa no estaba demasiado abierta a un nuevo amor porque acababa de salir de una relación larga, entre ellos la conexión fue máxima y en septiembre de 2010 confirmaban su romance. La boda no se hizo esperar y la pareja se juró amor eterno en diciembre de ese mismo año.
Cualquiera podría pensar que, celebrándose un 25 de diciembre, la pareja organizó una boda de invierno, pero nada más lejos de la realidad, porque se casaron en secreto en una paradisiaca playa de Indonesia. Fue una ceremonia alejada de grandes lujos e histrionismos, un momento para ellos que, a pesar de ser un tanto improvisado, fue muy especial y, sobre todo, legal.
El propio Chris revelaba durante una entrevista para Good Morning Britain que lo habían improvisado un poco, tomando la decisión sobre la marcha. “No había planes para ello”, explicaba el actor, que en 2010 todavía no era tan conocido como ahora (Thor es de 2011). “Para ser sinceros, estábamos de vacaciones y dijimos: ¿Por qué no nos casamos? Probablemente, debería haber habido más planificación, pero todo salió bien”. La boda se celebró en el hotel ecológico Nihiwatu.
El color blanco se convirtió en el gran protagonista, porque no fue solo el que escogió la novia para su vestido, también Chris vistió de blanco marfil. A pesar de ello, todas las miradas se posaron en Elsa, como suele ser habitual en todas las bodas, siendo el vestido de la novia el que robe parte del protagonismo a la pareja.
Ella escogió un diseño sencillo, pero sofisticado, un vestido femenino y de inspiración romántica de Armani Privé, ligero e ideal para una boda en la playa. También de color blanco marfil, era un diseño palabra de honor de corte sirena, elaborado en seda, con una cola ribeteada con pequeños volantes.
Las fotografías del enlace revelaron que Pataky escogió un maquillaje muy natural, con el que se potencia su gran belleza, además optó por llevar el cabello recogido, despejando su rostro y evitando que el viento enredara su peinado, algo que no pudo evitar que sucediera con el velo, de tul, lo que daba un aspecto más vaporoso al conjunto.
En mayo de 2012 daban la bienvenida a su primera hija en común, India Rose, y en marzo de 2014 nacían los mellizos Tristán y Sasha.