El 2024 viene cargado de enlaces matrimoniales como la de Ana Guerra y Víctor Elías. Una de las bodas que más expectación está generando es la del alcalde de Madrid, José Luis Almeida y Teresa Urquijo, hija de los aristócratas Lucas Urquijo Fernández de Araoz y Beatriz Moreno y de Borbón. La pareja, que hizo pública su relación el junio del año pasado, tiene planeado pasar por el altar el próximo 6 de abril.
Quedando dos meses para el enlace, la futura novia ha decidido viajar rodeada de sus mejores amigas para celebrar su despedida de soltera. Con todo lujo de comodidades, el grupo ha pasado este fin de semana en Milán y una de ellas, Luisa Bergel, ha compartido todos los momentos vividos durante esta escapada.
El viaje comenzaba en el aeropuerto, donde el grupo de amigas era recogido por un chófer que les esperaba con un cartel con la frase “Teresa bride to be” (Teresa futura novia). Era la propia Teresa la posaba al lado del hombre sonriente con un gorro cowboy blanco con un bordado con la palabra “Bride”, dejando claro quién era la que iba a pasar por el altar. Así empezó su aventura en Milán. Las chicas se quedaron en un hotel céntrico en Vía Tívoli a quince minutos andando de la mítica catedral de la ciudad, donde se harían una foto posando las ocho juntas.
Por la noche decidieron ir a tomar unos vinos en un local típico de Milán, al que después siguió una cena en un restaurante japonés con karaoke donde se intercambió el sushi por las copas. Por último, la noche finalizó en un club donde no faltaron las botellas de vodka. Al día siguiente repusieron fuerzas con comida italiana y helados artesanos. Una despedida de lo más dulce.
Sería la propia Luisa la que presentaría a su amiga con el político, 22 años mayor que ella. La pareja confirmó su relación en verano del año pasado y no sería hasta unos meses más tarde que Almeida confirmaba que había pedido matrimonio a su chica. Desde entonces se han ido descubriendo detalles de cómo será el enlace. El pasado fin de semana tuvo lugar la pedida de mano, a la que asistieron únicamente su círculo más cercano y donde los prometidos se intercambiaron los regalos: un enorme ramo de rosas rojas para ella y un valioso reloj estilo clásico para él.
El sitio donde se darán el ‘sí quiero’ tendrá lugar en el Barrio Salamanca de Madrid, con su posterior convite en la finca El Canto de la Cruz, perteneciente a la familia de la novia. Se espera que entre los invitados de la boda haya una lista de nombres de políticos, empresarios y aristócratas.