Leo Messi y Antonella Roccuzzo celebraron su boda en junio de 2017. Desde que comenzaran su relación hace más de diez años forman una de las parejas más estables del mundo del fútbol, aunque en los últimos meses han circulado rumores acerca de una crisis en la relación que apuntaba a que la separación era inminente. Pero Leo y Antonella se han encargado de acallar esas suposiciones, logrando que tengamos más ganas que nunca de recordar su espectacular boda, celebrada en Argentina.
Ambos nacieron en Rosario, la tercera ciudad más grande de Argentina. Aunque provenían de ambientes diferentes, el destino quiso que se conocieran cuando eran solo unos niños. Un primo de Antonella, Lucas Scaglia, entrenaba con Messi en el Club Atlético Newell’s Old Boys y ambos se hicieron amigos con solo 10 años. Era el año 1997 y al llegar el verano, Lucas invitó a su amigo a veranear con su familia en Mar de Plata. En esas vacaciones conoció a Antonella, que en ese momento tenía 8 años. Después de muchos años siendo amigos, el amor llegó para quedarse.
Para celebrar su boda, no dudaron en volver a su ciudad natal, Rosario. Allí congregaron a 260 invitados y 155 periodistas que presenciaron cómo se daban el “sí, quiero” en una sencilla ceremonia que tuvo lugar en el hotel de lujo City Center Rosario, el mayor del país. Estuvieron acompañados en todo momento por Thiago, su hijo mayor, que en ese momento tenía cuatro años. Los cinco hermanos de los novios fueron los testigos del enlace. Uno de los momentos más emocionantes fue cuando Javier Pinola, futbolista de River, cantó una balada a los novios ante todos los invitados.
Messi iba impecable con un traje azul marino, a juego con el que lucía su hijo Thiago. Pero como era de esperar, todas las miradas estaban puestas en la novia, que deslumbró con un espectacular diseño de Rosa Clará. Más de 200 horas de trabajo hicieron falta para realizar el vestido con un profundo escote en forma corazón, tirantes de encaje y espalda con aplicaciones de guipur. Antonella estaba radiante con este diseño que le sentaba como un guante, y luciendo su pelo largo y ondulado con un sencillo semirecogido.
Además de contar con la presencia de sus respectivas familias y amigos más cercanos, la celebración se llenó de futbolistas en una reunión que nadie quería perderse. Allí estuvieron Piqué y Shakira (que rechazaron posar en la alfombra roja), Carles Puyol y Vanesa Lorenzo, Cesc Fàbregas y Daniella Semaan, Xavi Hernández y su mujer, Nuria Cunillera. Sin duda fue un gran día para la pareja, que sigue felizmente casada y tiene ya tres niños en común.