El compromiso no es para todos, eso está más que comprobado, pero las grandes bodas tampoco. Seguro que conoces a alguien con unas ganas locas de pasar por el altar pero más de una vez te ha comentado que eso de las grandes celebraciones, invitaciones por puro compromiso, etc., no es lo suyo. Y esa amiga tuya no está sola, pues en los últimos años parece que los grandes bodorrios de antes han ido desapareciendo por celebraciones más íntimas o con una reducción de invitados más que importante. Si ya hasta hay parejas que se casan solas, sin un invitado, una tendencia más que atractiva en tiempos de covid-19.
'Elopement wedding' es el nombre por el que se conoce a este tipo de bodas en donde estás tú y tu pareja, quién oficia la boda y, como mucho, el fotógrafo que va a inmortalizar el momento para luego tener un recuerdo. Este tipo de boda es algo así como irte a Las Vegas a lo loco y volver como marido y mujer pero con un toque más serio. Lo mejor es que puedes celebrar la boda donde quieras, ya sea en tu ciudad o pueblo, en una playa o un barco, en un bosque, junto a un río o en lo más alto de una montaña. Total, no hay invitados, así que aprovecha para dar el “sí quiero” donde te plazca.
Pero, ¿por qué alguien querría una boda tan, tan íntima? Pues ojito, que parece que hay más de un motivo. El principal parece que es más que obvio, ya que se evita todo el estrés que conlleva organizar una boda, como las invitaciones, el lugar de celebración, el reparto de mesas… Y, por supuesto, un ahorro económico más que notable, para qué engañarnos. Nada de gastos de menú, transporte, barra libre, etc. Mejor destinar todo ese dinero para ustedes mismos en ir al lugar donde siempre han soñado casarse o en el viaje de bodas que nunca olvidarán.
Eso sí, fuera de estos dos motivos de peso, para toda persona que odie las invitaciones por compromiso o el revuelo excesivo de gente en uno de los días más especiales para la pareja, este tipo de boda es más que perfecta, aunque puede que a los familiares y amigos más cercanos no les haga mucha gracia no estar presentes en un día tan especial para ambos. Por eso mismo muchas bodas de este tipo no son tan solitarias, sino que las parejas llevan un número muy reducido de invitados, en la mayoría de casos pueden sobrar dedos de la mano si te pones a contar.
Uno de los grandes beneficios de una boda 'elopement' es el vestuario. Parece que en una boda convencional hay que seguir el protocolo y no salirse mucho de lo común. Pero realmente con una boda de este tipo, sin invitados, puedes casarte como te dé realmente la gana. ¿Qué quieren casarse con vestido blanco de cola y chaqué? ¡Pues perfecto! Como si quieren hacerlo con ropa informal, en vaqueros o desafiando las reglas nupciales con un vestido negro.
Y la ceremonia la van a poder hacer como os guste, como siempre la han soñado. Aunque hay que tener una pequeña cosilla en cuenta. La mayoría de este tipo de celebraciones no se hace por la iglesia, por lo que si a efectos legales quieres que quede registrada habrá que darle el toque convencional y pasar por el juzgado con dos testigos para firmar los papeles de matrimonio. Pero oye, que más allá de esto, la ceremonia que tú organices puede ser como realmente desees.
Antes ya hablábamos del ahorro que es no tener que desembolsarte una gran cantidad de dinero en un banquete para decenas de personas. Pero poco se habla de que van a poder comer lo que ustedes quieran. Vamos, que si os apetece una hamburguesa no hay ningún problema, como tampoco lo hay si se van los dos a un espectacular restaurante con Estrella Michelin para pasar una velada inolvidable degustando grandes manjares.
En una 'elopement wedding' los dos serán los protagonistas y pasarán un día inolvidable en la que es la boda perfecta en tiempos de pandemia. Una celebración diferente, especial y, lo más importante, a tu gusto, como siempre has soñado que sea ese día. ¿Estás ya decidida a unirte a la tendencia y celebrar tu boda sin invitados?