La entrada del Four Seasons de Ginebra ha sido el escenario de un reencuentro histórico. Muy esperado. De esos que jamás pensamos que volveríamos a presenciar. Desde que salió a la luz el Caso Nóos y, años más tarde, se oficializó la separación de Iñaki y Cristina, ver a Urdangarin compartiendo espacio y tiempo con los Borbón era impensable. Su desvinculación de la familia real es total desde hace más de una década. Sin embargo, Irene Urdangarin, la última hija que tuvo con la infanta, ha logrado lo imposible el día de su graduación, a la que ha acudido la gran mayoría del clan.
Tal y como puedes ver en esta pieza de los compañeros de 'El Programa de Ana Rosa', Pablo, Juan, Irene, su padre y su prima Victoria Federica han sido los primeros en ser captados a su entrada al hotel. Segundos después ha llegado la abuela paterna, Claire Françoise Liebaert Courtain. Aún falta por ver a Cristina y a la reina emérita, que también estaría en las instalaciones. Aunque está confirmada la no asistencia de Felipe, Letizia y sus hijas, sí hay dudas sobre si acudirán don Juan Carlos y Froilán, que según informa Vanitatis han viajado juntos desde Abu Dabi para estar presentes en esta triple celebración.
Y sí, decimos triple porque el hecho de que tantos miembros de la familia se hayan desplazado hasta Ginebra no es casual. Además de la graduación, que será muy similar a la de la princesa de Asturias y en la que Irene compartirá protagonismo con el resto de compañeros del École Hôtelière de Lausanne, la joven se volverá a reunir con sus padres, primos, tíos y abuelos en el hotel en el que están hospedados para festejar tanto su 18º cumpleaños, que fue el pasado 5 de junio, como el de su madre, la infanta Cristina, que acaba de superar la barrera de los 50.
Este día tan importante en la carrera estudiantil de Irene Urdangarín también implica el reencuentro de sus padres, que llevan meses sin juntarse públicamente. La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, que están a punto de firmar su divorcio, habría llegado a un acuerdo por el bienestar de su hija pequeña, según adelanta la revista Semana.
El entorno de la expareja ha asegurado que ambos han acordado "tener la fiesta en paz" en la graduación de su hija Irene. La infanta y el exjugador de balonmano no quieren dar "la más mínima señal de discordia" delante de algunos de los integrantes de la familia Borbón que estarán presentes. "Quieren que las horas en las que coincidan transcurran con la mayor calma posible", aseguran personas cercanas a los protagonistas.