Al casarse con Guillermo, Kate Middleton pasó a formar parte de la familia real, pero también hizo que toda su familia se colocara, en mayor o menor medida, frente a los focos. Pasaron de ser una familia anónima a despertar un gran interés, tanto sus padres y hermanos, que siempre han intentado mantenerse en un segundo plano, como otros miembros de su familia.
Es precisamente uno de los hermanos de su madre, Gary Goldsmith, quien no ha querido seguir la tónica del resto de miembros del clan y ha optado en algunas ocasiones en dar un paso al frente y aprovechar los focos que iluminaban a su sobrina para conseguir un poco de notoriedad.
Gary es el hermano pequeño de Carole Middleton y a lo largo de los años ha intentado en varias ocasiones conseguir que los medios de comunicación se centraran en él, buscando una notoriedad de la que pocos otros miembros de la familia han querido disfrutar, prefiriendo dejar que los focos se centraran en otros y dejando que los titulares con su nombre fueran cada vez menos.
En una de sus últimas apariciones frente a las cámaras, Gary se atrevió a aventurar el momento en el que Kate reaparecería, también comentando en diferentes platós de televisión la polémica despertada por la fotografía retocada publicada en la cuenta oficial de Instagram de los príncipes de Gales. Pocas horas después, era la propia Princesa quien daba la cara en un vídeo explicando que se encuentra en tratamiento médico y que su ausencia era necesaria para encarar el camino que le queda por delante porque tiene cáncer.
Aunque esta haya sido una de las últimas apariciones de Gary en los medios, no ha sido la primera y tampoco la más polémica. De hecho, fue mucho más sonado cuando se confirmó que sería uno de los concursantes de Celebrity Big Brother, la edición británica de GH VIP. Fue el primer expulsado.
Goldsmith es un empresario de éxito que en 2005 vendió su empresa por 17 millones de libras. También ha protagonizado varias polémicas por sus problemas con la bebida y ha sido pillado fumando marihuana y esnifando cocaína. Además, en 2017 fue arrestado tras protagonizar, bajo los efectos del alcohol, una fuerte discusión con su entonces esposa, Julie-Ann Brown, en el centro de Londres. Se declaró culpable y fue condenado a pagar una multa de 5.000 libras e ingresar en rehabilitación.
Gary ha estado casado en cuatro ocasiones, la primera de ellas con Miranda Foote, con quien se casó en 1993. En el 97 volvía a pasar por el altar, esta vez con Luan, con quien tuvo a su única hija. De nuevo probaría suerte al conocer a Julia Leake, y su última esposa fue Julie-Ann Brown, con quien protagonizó el sonado escándalo.
Nunca se ha cortado a la hora de decir lo que piensa sobre la familia de su sobrina, de hecho tiene una opinión bastante marcada sobre si el príncipe Harry merece el perdón de los suyos y llegó a calificarle de “egoísta” durante una entrevista para el Daily Mail.