Tras la boda de la infanta Elena y Jaime de Marichalar en marzo de 1995, las revistas del corazón de nuestro país comenzaron a especular con una posible relación entre el entonces príncipe Felipe y Tatiana de Liechtenstein, la princesa que pudo ser Reina de España. A estas alturas ya sabemos que los vaticinios no se cumplieron y que la relación que hubiera entre los jóvenes royals en aquella época no prosperó. Conocemos muy bien qué pasó con nuestro príncipe, pero ¿qué fue de Tatiana de Liechtenstein?
Aquellos rumores de una posible relación entre Felipe y Tatiana no surgieron de la nada. La joven, que estaba a punto de cumplir 22 años en aquel momento, se había trasladado a Madrid para estudiar dirección de empresas en la European Business School, un prestigioso centro privado de la capital.
Hija de del príncipe Hans Adam II y la princesa María Kinsky, Tatiana parecía cumplir todos los requisitos para convertirse en la esposa del heredero a nuestro trono. De una edad similar a la del príncipe (entonces tenía 26 años), perteneciente a una ilustre casa real europea y de una belleza incuestionable, encarnaba la imagen de la perfecta princesa.
Con el tiempo quedó muy claro que el príncipe Felipe y Tatiana de Liechtenstein solo fueron buenos amigos y compartieron actividades y ratos de ocio durante los años que la royal estuvo viviendo en Madrid. De quien sí se enamoró Tatiana fue del barón Phillip von Lattotf, con quien se casó en 1999, en la catedral de San Florian de Vaduz, en la capital de Liechtenstein.
Tatiana tiene actualmente 50 años de edad y lleva una vida muy discreta en la ciudad austríaca de Goldgeben. Es madre de siete hijos, que tienen edades comprendidas entre los 10 y los 20 años, y cuyos nombres son Lucas, Isabel Ángela Tatiana, María Teresa, Camila María Catalina, Ana Pia Teresa María, Sofía Catalina y Maximiliano. No resulta fácil verla en eventos de la realeza, aunque nunca se pierde la Fiesta Nacional de Liechtenstein, que se celebra cada año en el mes de agosto.