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Hoy se cumplen veinte años desde que los actuales reyes de España, Felipe VI y Letizia se dieron el ´sí, quiero' en una multitudinaria boda, pasada por agua, en la madrileña Catedral de la Almudena. Desde que se supo del compromiso entre el por entonces príncipe de Asturias y la periodista, el foco mediático apuntó directamente a la vida personal de la presentadora de informativos y, muy en especial, a su familia. De ella ya formaba parte por entonces una pequeña Carla Vigo, hija de Érika Ortiz y Antonio Vigo, que fue paje en el enlace. Dos décadas después, y tras una mala racha personal y profesional, la sobrina de Letizia vive un momento dulce: ha retomado su faceta como actriz.
Desde que cumpliese la mayoría de edad en octubre de 2018, Carla ha pasado a convertirse en uno de los miembros de la familia real española con mayor proyección pública. En este tiempo ha sido más o menos habitual que acuda a eventos y photocalls, que conceda entrevistas y que comparta buena parte de su vida en sus redes sociales. Todo ello se ha amplificado debido a la vocación artística de la prima de la princesa Leonor y la infanta Sofía.
La joven se matriculó en arte dramático con la intención de convertirse en actriz y bailarina. Con el paso del tiempo, comenzó a dar sus primeros pasos en el mundo del espectáculo, llegando a debutar sobre las tablas en 2021 de la mano de Rafael Amargo, con un papel en 'Yerma', adaptación de la obra de Federico García Lorca. Además, ha trabajado también como modelo. Pero hace unos meses, por prescripción médica, tuvo que poner punto y aparte a su sueño de dedicarse al mundo del espectáculo.
Porque Vigo ha atravesado una temporada complicada recientemente, tras distintos ingresos hospitalarios, problemas de salud mental y otros relacionados con la alimentación. De hecho, el pasado mes de marzo revelaba que vivía en un piso tutelado junto a otras ocho personas y que su única fuente de ingresos era la pensión de orfandad derivada del fallecimiento de su madre, en 2007, cuando Carla tenía solo siete años. Pero las cosas han comenzado a cambiar, y la sobrina de Letizia afronta el futuro con un cierto optimismo.
Si hace unos días se confirmaba que la hija mayor del escultor Antonio Vigo había encontrado por fin casa para ella en Madrid, ahora tiene otro motivo de felicidad. Carla ha vuelto a retomar su carrera interpretativa y tiene un nuevo proyecto actoral entre manos. Como ha publicado El Español, se trata de una ficción que ha ideado y escrito su íntima amiga, la también actriz Josele Román. Tras recibir el guion, decidió embarcarse en esta nueva aventura artística, titulada 'Estrellas en la red', una serie cuyo piloto se ha estado rodando en los últimos días.
Román asegura que Carla "tiene grandes tablas como actriz", muy contenta con el resultado de la nieta de Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz. "Lo ha hecho muy bien", asegura al citado medio. La ficción se centra en cinco personajes femeninos maduros, y apuesta por enfrentar sus vidas con las de papeles más jóvenes. Vigo da a vida a la hija de la dueña de un centro de estética, y es, en la serie, pareja del también actor Jairo Moreno.