Diez años se cumplen ya desde aquel 19 de junio de 2014 en el que Felipe de Borbón fue proclamado rey de España como Felipe VI, apenas días después de la abdicación del rey Juan Carlos I. Una década en la que la familia real española ha propiciado un importante número de cambios en lo institucional, tendentes a una mayor transparencia y cercanía. Este último ha sido un punto sobre el que siempre se ha debatido mucho y, en los actos con motivo del décimo aniversario de la proclamación, se ha producido una escena que ha roto con la habitual rigidez de un evento de estas características. La princesa Leonor y la infanta Sofía le han dado una espontánea sorpresa a sus padres en pleno almuerzo.
Los diez años de reinado han supuesto el regreso a casa de las dos hijas del rey Felipe VI y la reina Letizia, tras meses fuera. Mientras Leonor ha finalizado el primero de los tres cursos de formación militar, en la Academia Militar de Zaragoza, Sofía ha pasado el primero de los dos años de sus estudios de bachillerato en Gales, como ya hiciera su hermana en su momento. Terminados sendos calendarios académicos, ambas han estado presentes hoy, lo que ha hecho Leonor se perdiese su graduación.
La jornada ha trascurrido con el habitual protocolo que suele marcar la práctica totalidad de apariciones e intervenciones públicas de los monarcas y sus hijas. Este tema, el del hermetismo y la rigidez ha sido una crítica habitual a la familia real española, en comparación sobre todo con otras casas reales europeas y pese a los obvios pasos adelante en lo que al aperturismo se refiere. Los escasos momentos de naturalidad y espontaneidad, de hecho, suelen recibir un importante eco en los medios por su carácter excepcional.
Y el día parecía trascurrir en esa línea hasta que al mediodía, antes que comenzase el banquete, las dos hermanas han protagonizado un inesperado momento. La familia real se ha reunido en uno de los salones del Palacio Real para almorzar junto a representantes de los distintos poderes del estado, así como de representantes de la sociedad civil a los que se ha condecorado previamente con la Orden del Mérito Civil.
Antes de comenzara el banquete, después del brindis del rey, y tras un revelador gesto de la reina Letizia, que parece haber sido cómplice en todo esto, hacia ellas, Leonor y Sofía se han levantado repentinamente y se han acercado hasta el centro de la sala. Allí, de pie, y ante el evidente gesto de sorpresa de los invitados y su propio padre, ambas han hablado. "Mámá, papá, majestades, perdón por colarnos pero también nosotras tenemos algo que decir hoy. Gracias por acompañarnos para recordar que en estos diez años hemos aprendido de nuestros padres lo que significa el compromiso que los cuatro tenemos con los españoles ", han pronunciado ambas, intercalándose su discurso, con el móvil en la mano, donde parece que lo tenían escrito.
"Ahora, me gustaría que se unieran en un brindis por nuestra madre y nuestro padre, por nuestros reyes. Porque desde que nacimos nos han enseñado el valor de esta institución, de la Corona. Su utilidad para nuestra sociedad, y su propósito de servir a todos. Mamá, papá, gracias", han concluido la princesa y la infanta. Todos los presentes han alzado entonces las copas para brindar, con el monarca visiblemente emocionado, riéndose. Las dos se han acercado para besar a sus progenitores posteriormente.