El rey Felipe VI y la infanta Cristina, juntos en su llegada a la boda de Victoria López-Quesada

Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Copa ya se han dado el ‘sí, quiero’. La novia, ahijada a su vez del rey Felipe y en cuya boda se convirtió en protagonista absoluta tras las patadas que Felipe Juan Froilán de Marichalar y Borbón le propinó, ha estado arropada en su día especial por su familiar, así como por otros rostros pertenecientes a la casa real.

El rey Felipe llega a la boda de su ahijada junto a la infanta Cristina

Este sábado 31 de agosto, alrededor de las siete de la tarde, la finca madrileña de Soto de Mozanaque, propiedad del duque de Alburquerque y situada en Algete, se ha vestido de gala para albergar el enlace entre Victoria y Enrique. Junto a ellos, han estado diversos personajes de la alta sociedad, siendo la a asistencia de Felipe VI una de las que más expectación causaba. Y es que anteriormente, ya se expresó que la fecha de la boda habría sido modificada con el objetivo de que el monarca pudiese asistir.

Así, el rey llegaba conduciendo su propio coche y en compañía de su hermana, la infanta Cristina, en un gesto con el que ambos confirman su acercamiento tras el caso Nóos. En el caso del primero, padrino de la novia, ha optado por un traje de corte tradicional y en el de la segunda, por un estilismo en color blanco al que ha puesto el broche de oro con un peinado recogido.

La reina Letizia, sin embargo, no ha podido acudir debido a su estancia en París, donde se encuentra apoyando a los deportistas españoles en los Juegos Paralímpicos. A pesar de ello, han sido muchos otros los que han acompañado a los recién casados en su paso por el altar.

El resto de invitados al enlace

Uno de los primeros en llegar hasta el lugar de la celebración ha sido Pedro López-Quesada, hermano de Victoria, que para la ocasión ha lucido un traje de la Armada similar al de Leonor en su entrada a la Escuela Naval de Marín, donde ambos serán compañeros este curso.

Carlos Fitz-James y su mujer, Belén Corsini, tampoco han querido perderse el enlace. El hermano del conde de Osorno, Fernando Fitz James, llegaba, en su caso, acompañado del sacerdote. Posteriormente, lo hacían Carla Royo-Villanova y su marido, el príncipe Kubrat de Bulgaria; los abuelos de Teresa Urquijo, Íñigo Moreno de Arteaga y Teresa de Borbón-Dos Sicilias; la infanta Elena con Victoria Federica e Irene y Juan Urdangarín.