El retrato de cadete de Leonor estará expuesto en la Academia Militar de Zaragoza: "Se ve reflejada”

Hasta el próximo 18 de octubre no se presentará en la AGM de Zaragoza el retrato de cadete de la princesa Leonor, sin embargo, ya se sabe que está “encantada” con la obra. Así lo ha declarado su creador, que además ha conocido las opiniones del rey Felipe VI y la reina Letizia.

La opinión de la princesa Leonor sobre su retrato de cadete

En apenas dos semanas, la obra sobre lienzo será expuesta de forma permanente en la ciudad de Aragón. Aunque por el momento se desconoce si su protagonista, la princesa Leonor, abandonará por unas horas la Escuela Naval de Marín el viernes para estar presente en el acto, sí que ha salido a la luz que “está contenta con el resultado”: “Era lo que más me preocupaba, que le gustara de verdad a la princesa de Asturias, pero según me han transmitido se ve reflejada”, ha expresado Augusto Ferrer-Dalmau a ‘Hola’.

En el mismo lugar, el creador del retrato ha querido resaltar que los reyes, por su parte, también han quedado más que satisfechos con el producto final tal y como ellos mismos le confirmaron en su último encuentro: “Pude charlar con Felipe VI y la reina Letizia en la entrega los premios ABC y me dijeron que les gustaba mucho. Están todos felices”, ha señalado. Del mismo modo, ha querido agradecer la forma en la que “el público ha acogido la pintura” y su reacción, la cual le ha “gustado muchísimo”.

La creación del cuadro

Aunque fue la Academia Militar de Zaragoza la que pidió el encargo, la Fundación Ferrer Dalmau, presidida por Pedro de Borbón Dos Sicilias, decidió donarles la obra. Es entonces cuando mandaron una serie de fotografías a Augusto, que posteriormente fue incorporando minuciosamente algunos “detalles de cada una” para poder montar una composición: “Quería a una princesa con uniforme de combate, con el arma, la gorra grancé, la mochila. Una imagen natural, que refleje lo que ha vivido durante las maniobras como una soldado más”, ha dejado claro al medio citado.

Sin embargo, reconoce que le costó “conseguir la expresión”, razón por la que pasó ocho horas diarias durante alrededor de tres semanas para dar por terminado el cuadro, que finalmente mide 62 por 53.

Ahora, el que en su propio perfil de Instagram ha publicado el proceso final de la obra mostrando el vídeo en el que da las últimas pinceladas, ha afirmado que “es un sueño hecho realidad”.