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Se ha cumplido un año de aquellas polémicas imágenes de Genoveva Casanova y Federico de Dinamarca paseando juntos por Madrid y publicadas por la revista 'Lecturas'. Instantáneas que, sin duda alguna, dieron la vuelta al mundo. Sobre todo, porque afectaban de lleno a la familia real danesa, además de coincidir precisamente con el viaje de Estado de los reyes Letizia y Felipe a Copenhague. ¿Cómo ha cambiado la vida de los protagonistas de este "escándalo real" desde entonces? En Divinity, lo analizamos y te contamos su vida actual.
Para empezar, y valorando el primer impacto que provocaron esas fotos, la familia real danesa optaba por mostrarse bastante contundente. "Mantenemos una política desde hace años de no comentar ni confirmar cualquier detalle relacionado con asuntos privados", se veían obligados a pronunciarse ante la gran oleada de comentarios y rumores que surgían al respecto. "Además, nos gustaría enfatizar nuestro compromiso de respetar la privacidad de los miembros de la familia real, incluido el príncipe heredero", remarcaban a favor de Federico.
Sin embargo, esas declaraciones no impedían que los entresijos de una supuesta relación entre Genoveva y Federico de Dinamarca se convirtiese en la comidilla del momento. Un escándalo que inevitablemente pasaba factura a la familia real danesa, sobre todo a Mary Donaldson, esposa de Federico, quien acaparaba una gran cantidad de titulares valorando la supuesta crisis que llegó a atravesar la pareja. Y más teniendo en cuenta que, según las informaciones que aportaba 'Lecturas', la exclusiva no se limitaba a esas imágenes, sino que Federico llegaba incluso a pasar la noche en casa de Genoveva. En respuesta, Mary optaba por poner tierra de por medio y marcharse a su tierra natal, Australia. Un viaje al que acudió acompañada por sus hijos y que también daba mucho que hablar. Muchos apuntaron entonces a un supuesto ultimátum por parte de Donaldson: "O somos Reyes ahora o esto se acaba", le habría dicho a su marido, tal y como transmitía el director 'Lecturas', Luis Pliego.
Sin embargo, la mayor sorpresa llegaba justo cuando la reina Margarita de Dinamarca decidía abdicar a favor de su hijo, precisamente en medio de uno de los momentos más tensos para la familia. Así, Federico de Dinamarca ascendía al trono y se convertía en rey, mientras que Genoveva Casanova desaparecía por completo del mapa hasta mucho tiempo después.
Por su parte, ella tampoco perdía la oportunidad de emitir un comunicado con el que pretendía aclarar que no tenía ningún tipo de relación con el entonces príncipe heredero al trono danés. "Quiero dejar bien claro que no tengo relación alguna con él, como se está dejando caer. Somos amigos y las fotos no demuestran nada", confesaba en dicho escrito. "Salvo para quien quiera tergiversar las imágenes y ver donde no hay. Tenemos amigos comunes y yo no voy contando quiénes son mis amistades", concluía tajante la mexicana.
Una vez calmada la tormenta inicial, la vida de Federico de Dinamarca y su esposa ha seguido con total normalidad, dejándose ver bastante unidos y volcados con sus hijos. Aunque cabe decir que los rumores respecto a un distanciamiento y crisis en su matrimonio nunca han dejado de rondarles desde entonces, mientras la pareja se ha esforzado en demostrar todo lo contrario. De hecho, el beso que protagonizaron justo el 14 de enero, día en el que se proclamaron reyes y ascendieron al trono, marcaba el inicio de una nueva etapa en su vida. Un año después de la polémica, ambos se comportan como si nada hubiese sucedido, centrados en el futuro que le espera a la familia y sobre todo a su hijo mayor, el príncipe heredero Christian de Dinamarca.
Mientras que, por otro lado, Genoveva Casanova se quedaba destrozaba ante la gran repercusión que habían adquirido esas imágenes. Algo, que se encargaba de transmitir a su círculo más íntimo. Y, un año después, la mexicana ha procurado mantener un perfil bajo y no dar mucho que hablar. Una etapa en la que ha estado muy arropada por su expareja, Cayetano Martínez de Irujo, que no dudaba en dar la cara por ella, y también por sus hijos: Luis y Amina.
Por culpa de la polémica, Genoveva se vio obligada a cambiar su estilo de vida e incluso su residencia, al menos durante un tiempo. Y, después de haberse mantenido en un segundo plano durante estos últimos meses, próximamente dará el salto a la televisión. También son contadas las ocasiones en las que se ha pronunciado en redes sociales, donde ha aprovechado para agradecer el cariño y apoyo que ha recibido. "Los que han entendido mi ausencia y mi silencio, y los que me han hecho llegar mensajes de cariño y de apoyo. No se imaginan lo importante que ha sido eso para mí… ¡Mil gracias de corazón!", compartía, dejando claro que había necesitado unos meses de "paz y tranquilidad", para reponerse de lo sucedido. Además, no ha dejado de defender su derecho a la privacidad y todo parece indicar que estaría preparando una buena batería de demandas contra ciertos medios.
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