Desde que Richard Gere y Alejandra Silva se conocieran en el año 2014 en uno de los hoteles que ella poseía en Positano, entre ambos surgió una historia de amor que ha conseguido traspasar el tiempo y las fronteras. A día de hoy, el norteamericano y la española llevan una década juntos y se encuentran en uno de los mejores momentos de su relación. Prueba de ello es la última decisión que el actor ha tomado y que tiene que ver directamente con las raíces y gustos de su mujer.
Hasta ahora, el matrimonio, que pasó por el altar en el año 2018 y tiene dos hijos en común, a los que además se suman el que Silva trajo al mundo con su expareja y el de Gere, fruto de su idilio con Carey Lowell, había construido su vida en Nueva York. Sin embargo, el de Hollywood ha confirmado que la familia, a excepción de su hijo de 24 años, Homer, se muda a España.
Ha sido en una charla con Vanity Fair donde el protagonista de 'Pretty Woman' ha anunciado que el próximo otoño harán las maletas para asentarse en la capital: "Para mí, ir a Madrid va a ser una gran aventura porque nunca he vivido a tiempo completo fuera de Estados Unidos. Y creo que también será muy interesante para mis hijos”, ha explicado.
Además de definirse como un apasionado del “estilo de vida, la comida y la gente” española, se ha sincerado sobre el verdadero y especial motivo por el que ha optado por cambiar su lugar de residencia: “Para Alejandra, será maravilloso estar más cerca de su familia, de sus amigos de toda la vida y de su cultura. Ella fue muy generosa al darme seis años viviendo en mi mundo, así que creo que es justo que yo le dé al menos otros seis viviendo en el suyo".
El estadounidense y la gallega tienen un claro destino en Madrid para establecer su domicilio. Según el citado medio, la pareja tiene previsto vivir en el lujoso vecindario de La Moraleja, en una casa de 800 metros cuadrados con dos plantas, ocho habitaciones, un dormitorio principal con dos vestidores, seis cuartos de baño, un semisótano, una bodega y un garaje con capacidad para tres coches.
En el exterior, una gran parcela de 2.500 metros cuadrados con jardín acogerá una piscina rodeada de las zonas verdes comunes y campos de golf en la más estricta seguridad e intimidad y otros servicios privados. También en sus alrededores hay colegios bilingües que habrían sido otro de los requisitos definitivos de ambos.
En el barrio, las viviendas de obra nueva suelen estar valoradas alrededor de los 10 millones de euros y entre sus vecinos se han llegado a colar rostros como el de David y Victoria Beckham o Sergio Ramos y Pilar Rubio. Sin embargo, en el caso de Richard y Alejandra, habrían optado por reformar una de segunda mano con un precio estimado de 3,5 millones de euros.