'Desfógate', el documental que visibiliza la menopausia en el que han participado 300 mujeres de toda España

¿Cómo se vive la menopausia hoy y cómo se vivía antes? Cada 18 de octubre se celebra el Día Mundial de la Menopausia con la voluntad de arrojar luz sobre esta etapa de la mujer que implica el final de su etapa reproductiva. Con este mismo fin se lanza ‘Desfógate’, un cortometraje documental que ahonda en las experiencias de más de 300 mujeres que están atravesando este momento vital

Detrás de 'Desfógate' está Domma, una empresa especializada en el tratamiento y acompañamiento de la menopausia, que cuenta con el asesoramiento de ginecólogas, nutricionistas y terapeutas en la creación de sus productos (entre ellos la "viagra femenina" natural) que lo estrenará YouTube y Vimeo y se difundirá en sus redes sociales. ¿El objetivo? Exponer qué implica la menopausia, qué cambios operan en el cuerpo de las mujeres que la atraviesan (alrededor de ocho millones en España actualmente) y, de paso, desterrar muchos mitos y lugares comunes.

La menopausia, un tabú que comienza a desmitificarse

Hasta hace nada, “apenas dos o tres años”, según Cristina Martínez, cofundadora de Domma, la menopausia era un tema de conversación que no tenían madres e hijas. Al igual que sí se ha ido abordando poco a poco el de la menstruación, el fin de la etapa reproductiva sigue siendo una tarea pendiente. 

Además, socialmente se tenía una idea de las mujeres tras la menopausia muy distinta a la que (insistimos: muy poco a poco) se comienza a tener hoy. “Mentalmente hemos asociado la menopausia con el envejecimiento, con que nos miren como ‘viejas arrugadas y acabadas’”, añade Martínez. El arquetipo de mujer por encima de los 50 —edad media en la que suele aparecer la menopausia— era más o menos este; en parte, porque implica el final de la vida fértil, algo íntimamente ligado a la “utilidad” de la mujer hasta hace relativamente poco. Sorprende y duele pensarlo, pero era así: cuando una mujer no podía tener más hijos, dejaba de tener un rol social. Sin embargo, en los últimos tiempos se ha vivido un cambio de paradigma gracias, en gran parte, al esfuerzo de distintas mujeres y colectivos por visibilizar la menopausia. 

Del silencio de entonces a la normalización de ahora

Penélope Cruz, Tania Llasera, Naomi Watts, Gwyneth Paltrow o Salma Hayek son solo algunas de las famosas que han aportado su grano de arena para visibilizar la menopausia: que mujeres estupendas como ellas la desmitifiquen ha sido esencial para dar un paso necesario. “Era común pensar que, a partir de la menopausia, todo iba cuesta abajo: problemas de salud, pérdida de feminidad y una sensación de ser menos atractivas”. Poco que ver con las celebrities mencionadas, desde luego. En esta línea, mujeres anónimas de ciudades como Barcelona, Valencia, Bilbao, Marbella y Málaga explican también en el documental, que se puede ver en las redes de Domma, cuáles son los signos de estos cambios hormonales en ellas: desde sentir “un horno por dentro” o no hablar de la sequedad vaginal “incluso cuando duele” mantener relaciones sexuales, hasta tener que estar “disimulando los cambios de humor, para no parecer exageradas”. 

“Hoy en día se habla más de cualquier tema, también de salud femenina”, explica Cristina Martínez. Uno de los factores definitivos a la hora de lograr que las historias de mujeres con la menopausia permeen en la sociedad es la viralización que permiten internet y las redes sociales, gracias a las cuales “las mujeres comparten sus historias y crean comunidades, lo que ha ayudado mucho a normalizar el tema”. Y en esa línea, Domma ha incorporado también un enlace en su web con el nombre del documental, 'Desfógate', para que cualquier mujer, anónimamente o dando su nombre, hable de su propia experiencia.

Más esperanza de vida, más años con menopausia, más bienestar

Antes, la menopausia era prácticamente la antesala de la tercera edad. Pero hoy las mujeres “viven mucho más tiempo y pasan buena parte de su vida después de la menopausia”, comenta Cristina Martínez. “Esto ha hecho que se preste más atención a mejorar la calidad de vida en esta etapa y se hable más de ello”. No solo eso: la invisibilidad social de esta etapa hacía que muchas mujeres sufrieran los síntomas en silencio y sin nada que las ayudara a mejorarlos. Desde tratamientos hormonales hasta suplementos naturales, actualmente hay toda una gama de productos a su disposición para minimizarlos. “El cambio de mentalidad también ha sido clave”, comenta la cofundadora de Domma. “Se habla mucho más sobre el autocuidado, la salud mental y el bienestar de las mujeres. Ahora tienen más información y apoyo entre ellas”. 

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