Muchas personas cuando llegan a la etapa de los 40 años experimentan la crisis de los cuarenta. Surgen momentos de confusión, la insatisfacción brota y la hoja de ruta establecida se replantea. Como toda crisis, esta implica una fuerte reconstrucción personal, una inversión en analizarse uno mismo y hacer las transformaciones pertinentes que permitan adentrarse con ganas en la segunda parte de nuestra trayectoria vital.
Hugo Silva, en su última entrevista, reconocía que estaba viviendo este proceso en sus propias carnes. El actor asistía al programa de Pablo Motos para promocionar la película ‘Un novio para mi mujer’, asegurando en su paso por el programa que le han diagnosticado presbicia -vista cansada-, defecto refractivo que también sufre el personaje que interpreta en este nuevo film. “Me empezó a pasar en el rodaje”, recordaba el intérprete, que salió del oftalmólogo con gafas para leer.
Ante esta revelación, el presentador del espacio le preguntó directamente si estaba padeciendo la mencionada crisis. “Un poquillo a lo mejor, un poco. Es normal”, le quitaba hierro al asunto Hugo, que reconocía que, como consecuencia de este trance, le cuesta reconocerse cuando se pone frente al espejo: “La putada es que te miras y dices, ‘¿usted quién es?”.
“Yo creo que es porque piensas en las cosas del futuro de otra manera que cuando tienes 30, pero es normal. Cuando tienes 30, todavía te queda mogollón. Con 20 también. Pero cuando tienes 45, hay veces que dices 'no sé si me va a dar tiempo a aprender a hacer esto'. Te empiezan a llegar pensamientos así", reflexionaba sobre su propia experiencia. "Pero realmente por dentro son 15 o 16 años. Por ahí ando yo", bromeaba Silva, que no está intentando paliar este trance comprándose una moto o apuntándose a triatlones, como suelen hacer algunas personas a su edad: “Me da una pereza que te cagas".
A sus 45 años, Silva puede presumir de haber sido parte de veinte películas, varias obras de teatro y cerca de trece series de televisión. En lo personal, aunque ha evitado sacar a la luz cualquier aspecto de su intimidad, sabemos que es padre de dos hijos, Daniel y Darío, que llegaron a su vida gracias a una íntima amiga de la infancia que se quedó embarazada por inseminación artificial. Actualmente los pequeños tienen nueve años y no fue hasta que cumplieron tres cuando se hizo pública una paternidad que estaría compartiendo con la actriz Marta Guerra, con quien formalizó su noviazgo en 2017.