En diciembre de 2021 una inesperada noticia sacudía al mundo de la cultura española: la muerte de Verónica Forqué a los 66 años. La actriz fue encontrada en su domicilio de Madrid, poco después se confirmó que se había suicidado. La pérdida de una de las caras más icónicas del cine español generó entonces un importante shock en su entorno más íntimo, con su hija María Forqué a la cabeza, así como entre los seguidores de su carrera y entre sus compañeros de profesión. Recientemente Pedro Almodóvar, que trabajó con Verónica en un par de largometrajes, ha hablado como nunca de su fallecimiento.
La relación entre la actriz madrileña y el cineasta manchego vino marcada por la colaboración profesional entre ellos. Forqué apareció por primera vez en una película del que es nuestro director más internacional en 1984, '¿Qué he hecho yo para merecer esto?', con un rol secundario. Casi una década después, en 1993, le daría un rol protagonista en 'Kika'.
De la intérprete ha hablado Pedro en muchas ocasiones. Una de las más recientes, durante su multitudinario tanatorio, cuando destacó que era "una persona buenísima, una especie de ángel", que nunca llegó a perder la inocencia de la infancia y que era "todo luz". Como actriz, ha destacado de ella sus dotes para la comedia y el drama, recordándola como una de las grandes y reconociendo que, en los rodajes, siempre estaba muy preocupada por todo el equipo, intentando aportar soluciones a todos los problemas que pudiesen surgir.
Ya entonces, durante el último adiós público a la intérprete, apuntó el de Calzada de Calatrava que no entendía cómo Forqué se había podido ir de esa manera. "Era la única persona a la que nunca hubiera imaginado un final como el que ha tenido", aseguraba entonces, recordando lo "resuelta" que tenía la madrileña su vida espiritual. Una reflexión sobre la que ha profundizado recientemente durante una entrevista con Mercedes Milá en el programa 'No sé de qué me hablas', más de dos años después de la muerte de la protagonista de títulos como 'Bajarse al moro', 'Pepa y Pepe' o '¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?'.
En dicha charla, Pedro ha admitido que no reconocía a la actriz cuando la veía en televisión durante sus últimas intervenciones públicas. "No era la persona con la que yo había trabajado", se ha sincerado, destacando que era una persona "absolutamente distinta", que ni hablaba ni leía así, por lo que le desconcertó mucho verla de esa manera. "Era otra Verónica que debía de estar sufriendo una barbaridad", ha considerado el director de títulos como 'Volver' o 'Dolor y gloria'.