Los miembros de la familia de Iñaki Urdangarin no suelen hablar sobre sus vidas en público. Pablo Urdangarin, el segundo hijo de la infanta Cristina, sin embargo, ha roto esa norma no escrita al conceder una entrevista a la agencia EFE en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, donde abordó asuntos personales relevantes, como su carrera deportiva, su familia e incluso su situación sentimental actual. El joven de 22 años ha transmitido su gratitud y admiración hacia su padre, reconociendo la estrecha complicidad que tienen, a pesar de que prefiere evitar comparaciones.
"Mi padre dejó el deporte cuando mi madre estaba embarazada de mí, así que no le he visto jugar, pero me gusta ponerme vídeos y ver cómo era. No me gusta que nos comparen, pero lo entiendo", comentaba Pablo, que está centrado tanto a sus estudios como a su carera deportiva, y se vislumbran numerosos logros y éxitos en su horizonte. "Estoy intentando dedicarme a lo que me gusta [...] En La Masía te enseñan muchos valores, no solo del club, sino de la vida en general, creo que lo he podido aprovechar bastante y me han ayudado mucho a ser quien soy hoy en día", admite.
Además de abordar temas deportivos y la relación que mantiene con su progenitor, Pablo también ha hablado por primera vez de su relación con Johanna Zott, y ha destacado lo mucho que disfruta de pasar tiempo junto a ella.
"Lo que más me gusta hacer en mi tiempo libre es estar con mi novia y los suyos, es como sentirme en familia", se sincera el cuarto nieto de los eméritos, que confirma que se siente bastante arropado por su familia: "Tengo primos en Barcelona y hago cosas con ellos".
Respecto a sus hobbies, Pablo encuentra en las películas y las series de televisión una vía de escape y desconexión del mundo cotidiano. Disfrutar de estas formas de entretenimiento le brinda la oportunidad de dejar atrás las preocupaciones y la rutina diaria.
"Vi hace poco una en Netflix, 'Night Agent', y de pelis veo bastante, soy un aficionado", comentaba a los compañeros de la citada agencia, a quienes explicaba que, al igual que el resto de los jóvenes, también utiliza las redes sociales, a cuyos perfiles solo tienen acceso su entorno más cercano: "Prefiero guardar mi vida privada para mí mismo. Sigo a mis amigos, a mi familia...".