David Bustamante ha hablado en más de una ocasión de su situación económica. Hace unos años, en una visita al programa de David Broncano, el cantante contó que el éxito de su cuenta bancaria no procedía al completo de la música. El artista explicó que uno de sus grandes éxitos son los perfumes que llevan su nombre, una faceta laboral hasta ese momento desconocida que le hace ganar grandes cantidades de dinero. "Cada 30 segundos se vende un perfume de los míos, pero desgraciadamente no vendo un disco cada 30 segundos. Yo soy un perfumista que canta, si quieres verlo así", dijo en tono de broma en aquel momento.
Ahora, en el recorrido por su pasado que ha hecho en 'El camino a casa', David Bustamante ha recordado que nunca ha sido un buen economista. El artista contaba que con tan solo 14 años, cuando empezó a trabajar en al obra, cobró 80 mil pesetas en su primer sueldo, un dinero que no quiso ahorrar para él, si no que lo gastó en un buen regalo para su madre. Sin embargo, sus cálculos salieron mal y aspiraba a comprar algo que era mucho más caro de lo que él podía acceder. "Me endeudé además. Como economista iba mal. Me gustó mucho una pulsera de oro blanco y brillantes, pero yo cobraba 80 mil pesetas y compré una pulsera que valía 95 mil. Tuve que estar pagándola dos meses", ha recordado el artista.
La madre al recibir aquel regalo no pudo evitar la emoción y aquello sirvió como precedente para que David Bustamante invierta siempre su dinero en "el bienestar" de todos aquellos que le rodean.
Así lo ha explicado el artista, que ha confesado que su "verdadera riqueza" es poder hacer regalos a sus seres queridos. Su Ferrari y sus cadenas de diamantes ("esas cosas que se llevan a día de hoy") son para él que a su madre, su padre, sus hermanos y sus abuelos, en general toda su familia, "no les falte de nada". "Ese es mi verdadero Ferrari", decía el artista.
Aunque actualmente vive en una impresionante casa en Boadilla del Monte, en Madrid, el artista ha dicho que se siente "muy afortunado" de haber nacido y crecido en un pueblo, concretamente en San Vicente de la Barquera. Aunque la vida de pueblo, en sus propias palabras, "es muy diferente a la de la ciudad", el cantante mantiene allí a su familia y viaja siempre que puede pasar volver a disfrutar del sitio en el que ha pasado gran parte de su vida.