Violeta Mangriñán desvela el motivo por el que está "destrozada" y señala a sus hijas: "Espero volver a ser yo"

La llegada de septiembre es sinónimo de vuelta al trabajo y, por ende, las agendas de las influencers vuelven a llenarse de proyectos profesionales y eventos. Sin embargo, el tiempo no pasa en balde para nadie, ni para estas jóvenes con grandes lujos en su vida. Una de las creadoras de contenidos de nuestro país que, precisamente, muestra la cara B del universo 2.0 es Violeta Mangriñán que, además de mostrar todo lo que conlleva dedicarse al universo 2.0, también suele enseñar lo negativo, como es la conciliación entre su trabajo y su maternidad.

Precisamente, hace unas horas reflexionaba sobre lo complicado que era para ella poder ser madre y, además, empresaria e influencer: "Ser madre y querer cumplir tus sueños profesionales es bien jodido, el sentimiento de culpa cada vez que tienes que separarte de tus hijos o hijas por trabajo es una mierda (...). Tengo muy claro la madre y la mujer que soy, hago todo lo mejor que puedo siempre, sé que con mi trabajo a ellas les doy un futuro mejor y también quiero que ellas sean trabajadoras e independientes en un futuro. La teoría la tengo clarísima, pero... Si quieres ser mamá, trabajadora y tienes sueños por cumplir, hazlo, pero no te engañes y que no te engañen".

Ahora, a través de su cuenta personal, en donde ya alcanza el millón de seguidores, la de Valencia ha hablado sobre sus últimas y tensas horas con hijas antes de coger un avión. ¡Te contamos todos los detalles!

El momento de tensión de Violeta con sus hijas

Si por algo se caracteriza Violeta es por su naturalidad en redes sociales. Desde que se diera a conocer en la pequeña pantalla gracias a su debut televisivo en 'Mujeres, Hombres y Viceversa', siempre ha mostrado que no tiene problema a la hora de pronunciarse según que temas y es que, lejos de la discreción, apuesta por mostrar tal y como es su vida real en el universo 2.0.

Minutos antes de coger un vuelo a París, la joven ha reaparecido diciendo que solo ha dormido tres horas y media. ¿El motivo? Sus dos hijas, que a penas tienen seis meses y dos años de edad. "Gia siempre ha dormido bien, Gala no. Pero Gia lleva un mes sin dormir y soy un zombie. No quiere dormir en su cuna, quiere dormir en nuestra cama y estamos absolutamente destrozados", ha comenzado diciendo.

Además, ha dicho que "no sabe como aguanta todo el día sin dormirse por las esquinas": "No soy una persona que vive cansada, soy un culo inquieto, hiperactiva y no me canso. Espero volver a ser yo algún día".