En julio del pasado año, Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz daban la bienvenida a su primera hija en común, Laia. A pesar de su gran actividad en las redes sociales, donde la periodista acumula más de tres millones de seguidores, confesó que no expondría de forma pública su embarazo. Sin embargo, finalmente cambió de opinión y tanto durante su estado como el posterior crecimiento de su primogénita ha compartido los avances en su faceta como madre. No ha ocurrido lo mismo con el importante paso que han dado respecto a la pequeña y que ahora ella misma ha relatado.
Durante su intervención en el podcast ‘Poco se habla’, Cristina ha desvelado que Dabiz y ella han bautizado a su primogénita: “He bautizado a mi hija en secreto. Estuvimos David, y sus padres y los míos. Y nadie más. Nadie se ha enterado”, ha confesado.
Además, ha querido contar más detalles sobre el día especial para la familia: “Fue en la calle de Los Pedroches, es muy fuerte. En la parroquia de Santa Eulalia, que está en la calle de Los Pedroches, en Entrevías, mi barrio de siempre”, ha afirmado la de Vallecas.
A pesar de ello no ha señalado quiénes han sido elegidos como padrinos de la menor aunque podría tratarse de alguno de sus abuelos, únicos invitados al acto íntimo.
La presentadora ya se dio el ‘sí, quiero’ en 2015 con Dabiz en una boda celebrada en su casa de Vallecas y para la que ambos lucieron el mismo look: vaqueros, básica blanca y deportivas. De hecho, incluso habían encargado unas zapatillas exclusivas para aquel día pero tenían tanta prisa por dar el paso que no esperaron a que el repartidor llegase al domicilio.
Ahora, tras haber bautizado a Laia, Cristina se ha sincerado sobre los planes de futuro en su matrimonio: “Ahora solo falta casarme por la iglesia”, ha dicho. Y es que tal y como ella misma ha continuado afirmado, este verano le ha servido para darse cuenta “de que la vida es muy corta”.
Sus declaraciones están directamente relacionadas con las que ofreció a Vicky Martín Berrocal en su podcast, donde habló sobre sus creencias: “De repente ahora soy súper creyente. Necesito que alguien más la proteja. Creo que es la primera vez que lo digo, cada vez que salgo de casa le digo bendiciones. No sé, es como que necesito que alguien más me ayude a protegerla”, se sinceró.